4 principios legitimidad

Los genios invisibles de la ciudad
Guglielmo Ferrero
Todo el mundo sabe que Suiza es una Confederación compuesta de 22 cantones. […] La Constitución, fundada sobre el principio de la soberanía del pueblo, funciona por regla de la mayoría. El pueblo soberano delega sus poderes en representantes, encargados de elaborar las leyes o de aplicarlas. Estos son elegidos en elecciones libres pormayoría. […] La minoría tiene el derecho de criticar al poder, de oponérsele, de hablar y escribir libremente para convencer a la mayoría que ha estado equivocada y para convertirse, a su vez, en mayoría. He aquí un primer ejemplo de un principio de legitimidad o, para ser más exacto, de los principios de legitimidad combinados: el principio electivo y el principio democrático. […] Todos los suizosreconocen hoy que los dos principios de legitimidad en los cuales se apoya su Constitución son razonables y justos. En consecuencia, todos están convencidos de que los gobiernos designados de acuerdo con las reglamentaciones constitucionales tienen el derecho de mandar y que todo el pueblo, minoría y mayoría, tiene el deber de obedecer.
El principio electivo y el principio democrático no son losúnicos principios de legitimidad que han sido reconocidos y aplicados en Occidente. […] se han utilizado también el principio aristocrático-monárquico y el principio hereditario. En las monarquías una familia tenía el derecho hereditario de ejercer el poder soberano – Legislativo y Ejecutivo – ya fuese personalmente, ya por medio de cuerpos por él designados […] En las repúblicas aristocráticas, lasoberanía pertenecía por derecho hereditario a un grupo de familias que la ejercían directamente […] o bien por medio de un magistrado supremo elegido por ellas. En la más gloriosa de esas repúblicas – Venecia – el jefe se llamada Dux. El principio aristocrático y hereditario supone siempre la superioridad, más o menos definida y comprobable, de una familia o un grupo de familias. […]
Los cuatroprincipios de legitimidad – electivo y hereditario, aristocrático-monárquico y democrático – se embrollaron a través de los siglos al combatirse o colaborar unos con otros. El principio aristocrático-monárquico ha sido siempre inseparable del principio hereditario. El principio democrático es inconciliable con éste y sólo ha tolerado, a regañadientes, algunos residuos. El principio electivo,fundamental para las democracias, ha sido utilizado también por las monarquías, las aristocracias y ciertas instituciones autoritarias como la Iglesia Católica. […]
En resumen: los principios de legitimidad son justificaciones del poder, es decir, del derecho de mandar. Entre todas las desigualdades humanas, ninguna es tan importante por sus consecuencias ni tiene tanta necesidad de justificarse antela razón como la establecida por el poder. […]
¿Qué son y qué valen esos principios? Lo que los caracteriza es que están desprovistas de toda trascendencia; que son justos y racionales hasta cierto punto, es decir, en ciertas condiciones y se vuelven absurdos si faltan esas condiciones. A la pregunta “¿por qué unos tienen el derecho de mandar y otros el deber de obedecer?”, no hay una solarespuesta que satisfaga totalmente a la razón. […] Nadie duda de que un niño de 3 o 4 años debe obedecer a sus padres y que su padre y su madre tienen el derecho de mandarlo. ¿Por qué? Porque el padre y la madre conocen mejor que su hijito el bien y el mal. El derecho de mandar no puede justificarse más que por la superioridad. […] La mayoría no demuestra nada: ni la capacidad de un hombre o de unpartido, ni la verdad de una doctrina, ni la sabiduría de una decisión, ni la justicia de un fallo. Un hombre solo puede tener razón contra todo el universo: esto se ha visto y se verá hasta la consumación de los siglos. ¿Soberano el pueblo, esa masa enorme e informe de seres cuya gran mayoría no ha llegado más que a una preconciencia crepuscular de sí mismos? […] La soberanía del pueblo es el...