Alicia En El País De Las Maravillas

Alicia en el País de las Maravillas
Lewis Carrol
Alicia empezaba a cansarse de estar sentada junto a su hermana , que leía un libro sin ilustraciones.A pesar de sentirse un poco adormilada por el calor del verano,pensó en ir a cortar margaritas; de pronto , un conejo blanco , con grandes ojos rosados , pasó corriendo.
Sacando un reloj del bolsillo de su chaleco , el conejo dijo:
- ¡Estarde,es tarde! ¡Voy a llegar demasiado tarde!
Alicia se levantó de un brinco y lo siguió por el campo .
El conejo entró a una madriguera y Alicia tambien.
La niña calló por un pozo profundo .
De pronto,se acordó de su gata:
-¡Ay,Dina,cuánto me vas a hechar de menos esta noche!Espero que alguien se acuerde de ponerte leche.
¡Ojalá estuvieras conmigo!Yo creo que aqui no vas a encontrarratones,aunque talvez podrías casar algun murciélago,pero,¿Los gatos comerán murciélagos?
De pronto,¡Plum!¡Cataplum!,Alicia chocó contra un montón de hojas secas.
Pudo distinguir un largo pasillo;al fondo,alcanzó a ver al Conejo Blanco, que iba corriendo y gritando:
-¡Por mis barbas y mis bigotes!
¡Se me está haciendo tardísimo!
Cuando llegó a dodne habia visto al conejo,éste habia desaparecido.
Aliciase encontró en un salón largo, con muchas puertas,pero todas estaban cerradas.
Encima de una mesita de cristal habia una llavecita dorada.¿De qué puerta sería?De ninguna ; la llave era muy pequeña o las cerraduras muy grandes.Vio una pertecita situada atrás de una cortina.Alicia estaba contenta:la llave dorada abría esa puerta.
Por la cerradura alcanzó a ver un precioso jardín y quizo pasear porél.
Imposible.La puerta era demasiado pequeña.
Triste,Alicia regresó a la mesa,y vio una botellita con un letreto que decía:"Bébeme".Al principio dudó;finalmente lo bebió y sintió que se encojía.Ahora solo medía 20cm,y podía entrar por la puertecita.
¡Que mala suerte!Habia dejado la llave sobre la mesa.
Empezó a llorar.
Suspendió el llanto al ver bajo la mesa una cajita con un pastel,quedecía:"Cómeme".
-Si crezco,alcanzaré la llave;pero si me achico entrare al jardín.
Probó el pastel; sintió que no pasaba nada.
Alicia gritó entusiasmada:
-¡Carambamba!¡Carambamba!-Estaba tan sorprendida,que se olvidó de hablar bien-¡Cada vez soy más grande!
Contenta,recogió la llave y abrió la puerta, pero no pudo pasar.
De pronto,escuchó unos pasitos.Era el Conejo Blanco vestido de etiqueta;enuna mano llevaba un par de guantes de cabritilla y,en la otra, un abanico.
-¡Que problema!¡La duquesa se enojará si la hago esperar!
Al ver a Alicia,tan grande,salió corriendo asustado,soltando los guantes y el abanico,Alicia los recogió y empezó a abanicarse,mientras seguía llorando.Se puso uno de los guantes de cabritilla,ya que le quedaba y se dijo:
-El abanico me hizo pequeña.
Ahora si podréentrar en el jardín.
Al dar un paso,Alicia resvaló y calló hasta el cuello sobre un charco de agua salada, que le recordó el mar.En realidad,no era el mar,sino la gran cantidad de lágrimas que había derramado.
-¿Porqué habré llorado tanto?
Pero,¿Quién anda allí?-.Era un ratón que tambien habia caido al agua.
-¡Oh,ratón!¿Podría decirme como salir de este mar de lágrimas?.
Como no contestóAlicia creyó que sería extranjero y dijo en frances lo único que sabía:
-Oú est ma chatte?(¿Dónde está mi gata?)
El pobre roedor empezó a temblar.
-¡Oh,ratón!Disculpeme.Olvidé que gatos y ratoneas no se llevan bien,aunque si conociera a Dina,mi gata,cambiaría de opinión,es simpática,educada,y buena cazadora de rato...¡Oh,perdone!
El roedor trató de huir.
-¡Oh ratón,regrese,ya no hablaré de esostemas!
-Te contaría porque odio a perros y gatos pero en este mar hay muchos animales;salgamos-Le dijo el ratón.
En efecto,había un pato,un dodo-que es como un pájaro bobo-,un loro y un aguilucho , entre muchos más.Todos siguieron a Alicia y llegaron ilesos hasta la orilla.Los animales estaban completamente empapados,y sus cuerpos ofrecían un aspecto deplorable.Además,el humor de todos era...