Amores Perros

Amores perros

Todo estaba quedando listo para el gran encuentro. Un buen baño con mucha espuma y olor, una cepillada de pelo, una limpieza general y, como toquecito final, un lazo rojo. Mi perritaPelusa lucía churrísima para el tan esperado, y convenido entre los dueños, encuentro con su futuro novio, con el cual después de unas cuantas olidas por aquí y por allá, pasarían a consumar su amoren un lecho improvisado.

Después de muchas averiguaciones y visitas al veterinario, al fin pude dar con una señora que tenía un perro igualito a la mía, el mismo tamaño, la misma raza, y casi casiel mismo color, aunque eso no importaba tanto, así los hijitos salían variaditos pues.

El día D llegó después de tantas llamadas y coordinaciones; la dueña del perro, mi futuro yerno, estaba súperemocionada con la idea, por eso accedió apenas le describí a mi Pelusa. Quedamos en encontrarnos en un parque cercano a nuestras casas, para que los ya designados novios se conozcan y huelan el aromadel amor.

Apenas se vieron los tortolitos, se saludaron efusivamente con un movimiento de cola, las miradas de alegría iban y venían de un lado a otro y entre jugueteos y mordidas cariñosas todoparecía que iban a dar rienda suelta a sus pasiones entre las florecitas adornadas con alguna que otra abeja revoloteando entre ellas y el tupido gras mal cortado ya hace semanas.

Mi perra corría deun lado a otro esparciendo su olor coqueto entre los jardines mientras que su galán peludo olía cada sitio por el que ella pasaba y lo orinaba, marcando así su territorio y ostentando su granvirilidad. Ella lo veía como un simple juego, como un rato libre para correr y hacer amigos, para hacer hoyos enterrando tesoros misteriosos.

Después de tanto ajetreo, los enamorados se echaron bajo unárbol para reposar y recuperar energías, ya que estaba próximo el acto amatorio. Se olían, se lamían. Entonces, valiente el peludo enamorado se levanta decidido para pisar a mi coqueta perra; se da...