Angeles de Medellin

En la Medellín que es difícil ver desde el Centro, donde las condiciones de pobreza son extremas y tener un techo de eternit es casi un privilegio, un ángel sin alas, que habla inglés y que llego sinmucho dinero, trabaja con la esperanza de reunir recursos para mejorar las condiciones de vida a familias vulnerables, él es Mark Kaseman, Hace nueve años llegó a Colombia y en Medellín trabajadesde hace ocho. En su natal Rochester, en Nueva York (Estados Unidos), donde era voluntario de varias organizaciones que también se dedican a ayudar a los demás y donde se desempeñaba como profesor,este hombre de ojos claros y piel blanca llegó a Colombia con la intensión de conocer y recorrer todo nuestro país.
En el 2006 se encontró a unos misioneros de Estados Unidos que lo llevaron hastaRegalo de Dios, un sector de invasión en límites con Bello al que, incluso, la pavimentación no ha llegado por completo, quedó tan impresionado con lo que vio allí, que ha dedicado su vida a ayudar a losdemás sin recibir nada a cambio. Pese a que en varias ocasiones hasta lo han amenazado de muerte, este no fue impedimento para que Marcos (como así ya lo llaman) fundara Ángeles de Medellín,organización sin ánimo de lucro que cada año le regala una Navidad y Año Nuevo inolvidables a miles de niños de los barrios más altos del municipio de Bello: El Pinal, Regalo de Dios, Manantiales y BelloHorizonte.
Y esto no es todo desde entonces, junto con 90 voluntarios de todo el mundo que lo han contactado a través de su grupo en Facebook, mientras llegan a conocer o a estudiar en la ciudad, Marcosles arrebata los niños a las calles y les ofrece más oportunidades de vida a través de la fundación, con ellos recorren los caminos de piedra y barro de esos barrios olvidados y construidos por milesde desplazados, repartiendo juguetes, comida, ropa, esperanzas y alegría. La gente lo conoce como 'el Ángel gringo', y él los llama a ellos su familia. Kaseman montó una pequeña escuelita donde con...