Botero por SANTIAGO lONDOÑO

BOTERO
Fernando Botero es el artista colombiano que mayor reconocimiento internacional ha recibido. Nació en Medellín en 1932, se interesó en el arte desde la adolescencia cuando pintó motivos taurinos y figuras humanas, influenciadas por el arte mexicano de la revolución. También produjo unas tempranas ilustraciones de corte expresionista para la prensa local. Un artículo que publicó en 1949,titulado "Picasso y la inconformidad en el arte", le valió la expulsión del colegio. En este texto afirmó que el cubismo era un movimiento liberador contra la academia, al proponer la destrucción del individualismo a favor de un concepto comunista; en una prefiguración sobre su propia obra, definió a Picasso como creador de una "gigantomaquia monumental y sensual".
En 1951 presentó su primeraexposición individual en el estudio del fotógrafo Leo Matiz en Bogotá. Con el dinero reunido vivió en la población costera de Tolú por cerca de un año, donde soñaba con convertirse en el Gauguin latinoamericano. Al año siguiente, obtuvo el segundo premio en el IX Salón Nacional de Artistas. Gracias a este galardón y a las ventas de su segunda exposición, emprendió viaje de estudios a Europa.Desembarcó en Barcelona donde comenzó a descubrir el arte gótico y renacentista. En Madrid ingresó a la Academia de San Fernando y pintó copias de los grandes maestros en el Museo del Prado, al tiempo que las expresiones de vanguardia no le causaron ninguna atracción. El gusto e interés por el arte antiguo se consolidaría a partir de 1953 cuando se estableció en Florencia. Allí practicó pintura al óleo yal fresco, y estudió con fruición los murales de Giotto y de renacentistas como Piero della Francesca y Masaccio. También recibió clases de historia del arte con Roberto Longhi y leyó a Bernard Berenson cuyas ideas contribuyeron a reafirmar su interés por los volúmenes como valor estético fundamental.
La exposición que presentó al regresar a Bogotá en 1955 no fue bien recibida. Las obras teníanuna evidente influencia de los muralistas clásicos y de los artistas metafísicos italianos, en un momento en el que la abstracción era el movimiento innovador en el arte colombiano. Al año siguiente viajó a México, donde se decepcionó de los artistas mexicanos que había admirado de joven; estudió la pintura popular y la obra de Rufino Tamayo. De esta manera, comenzó a integrar las enseñanzasderivadas del arte italiano con la preocupación por lo latinoamericano. También exploró la manera de crear la sensación de monumentalidad mediante el cambio de escala de las partes componentes de ciertos objetos en los bodegones. Un viaje para exponer en Washington en 1957, lo puso en contacto directo con el expresionismo abstracto norteamericano; bajo su influencia trabajaría entre 1959 y 1961 conpinceladas sueltas y espontáneas.
Mandolina sobre una silla (llamada también En rojo y azul) (957) fue la obra con la que se inició la colección de arte del Banco de la República. Es un óleo de gran interés y belleza, que pertenece al período en el que Botero buscaba acuciosamente la expresión de sus preocupaciones plásticas y sentaba las bases de lo que sería su estilo artístico definitivo.Presenta en primer plano una mandolina, con la que descubrió la forma de expresar la monumentalidad de la figura, al alterar las proporciones entre sus partes. En materia cromática, así como en la composición y ejecución, el cuadro todavía refleja las influencias propias del proceso formativo en el que se encontraba inmerso el autor. El cuadro La Camera degli Sposi, pintado como homenaje a Mantegna,fue premiado en el XI Salón Nacional de Artistas de 1958. Esta obra, según Marta Traba (1985), “... fue su primera proeza de gran colorista y esa hazaña pesaba más, en la estimación seria del cuadro, que en la poderosa broma de las formas».
Cuando ya era un pintor reconocido en Colombia, Botero se estableció en Nueva York en 1961, donde permaneció doce años. Durante esta década, luego de...