campo de conocimiento
Esta historia que relato, es la de dos amantes q se conocieron casi por casualidad.
Ambos se subieron a un mismo barco que partía hacia un largo viaje de casi meses.Un viaje q no olvidaran.
Aquella mañana fría de invierno, coincidieron, todos los que viajaban solos, en un té.
Él se acercó, mu amable, para preguntarle si podían compartir la mesa. La joven,sorprendida no se negó en aceptar y disfrutar de la agradable compañía del caballero.
La charla comenzó de manera muy amena. Se contaron casi sus vidas, por lo que la charla se extendió hasta la cena.Los jóvenes tenían grandes coincidencias en sus vidas, por lo que no les fue difícil entenderse.
Legó la hora de dormir y acordaron en encontrarse en el desayuno. Los dos se fueron con una extrañapero agradable sensación a dormir. Al día siguiente, se encontraron, como acordaron.
Las charlas ya se tornaban muy agradables y estos jóvenes compartían mucho tiempo juntos, y las miradas yacomenzaban a tornarse cómplices.
Fue entonces que el muchacho decidió proponerle tener algo más que una linda amistad, mientras el viaje duraba el viaje. Ella, aceptó.
Y así pasaban juntoscompartiendo mucho tiempo de sus días…
Se aproximaba el día en el que el joven debía abandonar el barco. Él ya había llegado a su destino.
Ese día fue muy extraño para los dos. Sabían que debían separarse yles comenzaba a costar. Habían logrado comprometer sus sentimientos…llegado a su destino, algunos países antes que ella, el muchacho le pidió alguna dirección para poder enviarle cartas. Ella se ladio, diciendo: es esta mi dirección, y le entregó un papel, te la dejo aunque sé que jamás volveremos a vernos. Se despidieron y el barco continuó. Ambos siguieron sus rumbos algo inquietos por ladespedida y anhelando un reencuentro.
Pasados los días la joven llegó a su destino. Al llegar a su casa se encontró con una carta sin remitente q contenía una nota q decía: te espero a las 16 hs en el...
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