e 67 mapas novohispanos, en su gran mayoría indígenas, bajo resguardo del Archivo General de la Nación, 66 de ellos procedentes del grupo documental Tierras y uno más del deReal Fisco de la Inquisición. Además de representar el paisaje rural novohispano desde la perspectiva indígena de la época, en ellos se aprecia el sincretismo estético productodel intercambio cultural entre el viejo y el nuevo Mundo. Se distingue en los mapas elementos pictográficos de origen mesoamericano, tales como los caminos representados porhuellas humanas, los cuerpos hídricos señalados con el glifo característico, los toponímicos expresados con glifos compuestos (por ejemplo, Coatepec o cerro de las serpientes,de "coatl", serpiente, y "tepetl", cerro, aparece representado como un cerro con una serpiente) y la disposición circular de los elementos gráficos en torno al centro deldocumento, entre otros. En muchos casos también, la influencia de la cultura occidental es notoria en el colorido y en diversos elementos más naturalistas. Todos incluyen anotacionesen varias lenguas indígenas y en español.
Además de su evidente belleza, estos mapas constituyen -en sí y junto con los documentos textuales que los acompañan y explican-valiosas fuentes para la reconstrucción y estudio de la historia, en tanto versan sobre peticiones, límites y litigios relacionados con la posesión de la tierra. De igual manera,por su temática, contenido y carácter primigenio, estos testimonios conservan su importancia como sustento legal de la posesión territorial.
A continuación se enlistan los 67documentos que aquí presentamos con base en la denominación asignada a cada uno de ellos por el Archivo General de la Nación, y que aparecen agrupados conforme a los esta
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