Caso Haya De La Torre. Análisis

UNIVERSIDAD DEL AZUAY

Facultad de Ciencias Jurídicas
ESCUELA DE ESTUDIOS INTERNACIONALES

Derecho de los Tratados, Consular y Diplomático
CASO HAYA DE LA TORRE Y LA COSTUMBRE INTERNACIONAL

Alumna: Johanna Espinosa O.

Cuenca, mayo de 2011

1) Aspectos generales
La principal diferencia que surge entre ambos estados es la calificación unilateral de delito político por parte deColombia a lo ocurrido con Víctor Raúl Haya de la Torre en la rebelión e intento de golpe de estado en octubre de 1948 por el APRA. Se debate la no existencia de una prueba de que dicho delito puede calificarse unilateralmente por el estado que confiere el asilo en el derecho positivo ni en la costumbre. En cuanto al caso, el Doctor Cacheiro Frías menciona que al citar Colombia el art. 18 delAcuerdo bolivariano, que dispone: “Aparte de las disposiciones del presente Acuerdo, los Estados signatarios reconocen la institución del asilo, según los principios del Derecho internacional” se reenvia el caso a los principios del Derecho internacional, que no reconocen tal regla de calificación unilateral y definitiva.  Colombia se refiere luego al art. 4 del citado Acuerdo, relativo a la extradiciónde un delincuente del territorio del Estado donde se halle, lo que la Corte califica como irrelevante y confuso. Además Colombia invoca también la Convención sobre Asilo de 1928, que establece ciertas normas sobre asilo diplomático.  Sin embargo, la Corte señala que en esa Convención no existe ninguna norma sobre calificación unilateral por el Estado asilante.  Colombia sostiene que esa normaestá implícita en la Convención, y que es inherente a la institución del asilo.  La Corte no puede aceptar este argumento, ya que significaría una derogación del principio de igualdad soberana de los Estados y conduciría a los mayores abusos. “Asimismo, Colombia cita el art. 2, parágrafo 1, de la Convención de La Habana, que proclama el respeto del asilo siempre que la costumbre, las convenciones ylas leyes del Estado asilante lo admitan.  Siendo que el Derecho interno colombiano reconoce el asilo, Perú estaría jurídicamente obligado a reconocer el asilo otorgado a Haya de la Torre.  La Corte considera inadmisible esta interpretación, ya que llevaría a hacer depender  las obligaciones de un Estado signatario de las modificaciones que pudieran producirse en el Derecho interno de otro Estadosignatario.  Por el contrario, el art. 2 citado debe interpretarse como limitativo: el asilo podrá acordarse en la medida en que sea admitido por las leyes y costumbres del Estado asilante.  Además, nada se dice en este artículo respecto del derecho de calificación.” Finalmente Colombia invoca la Convención de Montevideo, la que Perú no ratifica por lo que no está obligado por esta. Acerca de estoSorensen menciona que “en cuanto a terceros y obligaciones impuestas por tratados internacionales… hay consenso general en que un tratado no puede imponer cargas sobre un tercero, es decir sobre un sujeto que no sea parte.” (2000:278)
En cuanto al carácter de urgencia o peligro inminente requerido para la concesión del asilo, la Corte llega a la conclusión que, al momento de otorgarse el asilo,no existía urgencia en el sentido de la Convención de 1928.  Y se establece que la dilatación del amparo por asilo se debió a motivos no reconocidos por el art. 2º, pgfo. 2º, de la Convención antes citada.
PONER CASO COMO TAL
2) Creación de la Norma Consuetudinaria

En la actualidad el asilo diplomático o político es en la práctica una institución casi propia de de la región latinoamericana.Por esto muchos hablan de un derecho consuetudinario de carácter regional. No obstante, sus inicios se dieron en Europa en la edad media cuando se daba asilo en sedes religiosas a perseguidos por la justicia. Se dice que luego de la Reforma esta figura cambió para aplicarse a perseguidos políticos y luego ésta se fundamentó en el principio de extraterritorialidad de las misiones diplomáticas...