Castella
La creación es libertad y, acaso, la vida debería ser creación, repetido invento. Reinvento. Es difícil, pero vale la pena. Don Arnoldo Herrera dio libertad en elConservatorio Castella: que el programa sea para el estudiante, y no al revés. Que el niño o la niña haga su camino. Que el aprender sea, en realidad, descubrir, como otros descubrieron islas o continentes.
Nopocas veces dijo: “El secreto de la educación reside en la libertad. Si hay libertad, hay creatividad, y si hay creatividad, hay trascendencia”. También dijo, como consejo a sus estudiantes: “Creer,crear y crecer”.
Hacer materia de estas palabras, ejemplo cotidiano en niños, niñas y adolescentes, fue la labor de Arnoldo Herrera González durante 43 años de esfuerzo, de paciencia, de no pocasdelicias y batallas, de reinvento pedagógico como director fundador del Castella.
Cuando en 1953 emprendió la empresa de una institución que conjugara los requisitos académicos con la prácticaartística, pocos creyeron en el proyecto. Treinta y ocho años después, al reconocerse su labor con el Premio Magón, la aprobación fue unánime: don Arnoldo merecía el premio y más, y de ello daban garantía susalumnos y exalumnos. Como con otros ganadores del premio, podemos enumerar libros, esculturas, composiciones o pinturas; el legado de don Arnoldo Herrera permite una larga lista de insignes egresadosde las aulas del Castella, Todos ellos, en una suerte de dominó, han sido a su vez maestros que multiplicaron y multiplican las prédicas de don Arnoldo.
Este transmitir del sentimiento que donArnoldo practicó, lo aprendió él mismo en un hogar en que se privilegiaba la expresión de lo sensible, especialmente a través de la música. Hijo del compositor Mariano Herrera y de Catalina González,desde su primera infancia comenzó su instrucción musical. A los quince años era profesor de música en Puntarenas y Tres Ríos y a los 19 años una beca le permitió partir a México, donde estudió...
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