Castración química

-Opinión personal
En cualquier órden social decente, los ciudadanos pueden ser forzados moralmente a hacer ciertas cosas, pero no pueden ser forzados moralmente a realizar una acción que signifiqueun delito, porque mas allá de que se discuta si es o no una pena, la opción del delincuente a acceder al tratamiento, esa acción atacaría la integridad de la persona humana, aún cuando esto puedaestar justificado algunas veces como castigo por un crimen.
Esta medida se aparta de la ley al tomar como objetivo la prevención especial negativa, y eso considero yo, significa un motivo para atacarlade inconstitucional, al estar en desacuerdo con nuestra ley fundamental que se guía en base a la prevención especial positiva, por lo que se tiene en cuenta el fin de la pena, la resocialización deldelincuente, para que pueda insertarse en la sociedad después de haberse superado. Pero a mi entender este tratamiento no cumple un rol de pena, ya que se deja al arbitrio del delincuente la opción desometerse o no, (tengo que aclarar que las consecuencias desfavorables para el reo por haberse negado al tratamiento también pueden atacarse alegando la inconstitucionalidad de esas medidas), pero detodos modos me parece aberrante que por decreto un gobernador abra paso para agravar una sentencia judicial, porque se atenta la integridad física del reo. Ninguna pena en nuestro ordenamiento jurídicoreviste dichas características de por sí es inconstitucional tal tratamiento, agregando que es patente el menoscabo al principio de la cosa juzgada, que por resolución ya determinó legítimamente unapena  a cumplir. Si la aceptación para la castración química es necesaria para la obtención de la libertad condicional, el procedimiento no es voluntario y resulta en principio inconstitucional porqueninguna provincia tiene facultades legislativas para modificar el art. 13 CP o la ley 24.660. Desde el plano histórico político parece una regresión de la pena  producida por la ilustración. Antes...