Cazadores de Microbios capítulos 6-12

Comenzare el ensayo con dos cazadores de microbios que siguieron con los trabajos de sus maestros, hablo de Emilio Roux y Emilio Behring. Emilio Roux descubrió que el bacilo de la difteria produce en veneno que es tan potente que un gramo de este veneno es capaz de matar a más de dos mil perros grandes. Una frase que me gustó de este capítulo y que refleja en el trabajo de Roux y Behring es “Porcada experimento afortuna tuvieron que pagar con mil fracasos”. Porque para descubrir la antitoxina diftérica sacrificaron la vida de cientos sino es que de miles de conejos y conejillos de indias. Pero esto lo habrían logrado sin los trabajos previos de Federico Loeffler.
Loeffler trabajó raspando una masa gris de las gargantas de niños muertos por la difteria, observaba esa masa al microscopioy observó bacilos en forma de maza. Loeffler examinó niño tras niño y no encontró a estos bacilos mas que las gargantas de los niños, a lo cual Loeffler se preguntaba-¿Cómo es posible que unos pocos microbios situados sólo en la garganta puedan matar a un niño tan rápido? A lo que Loeffler dijo después: “hay que descubrir esta toxina en los órganos de los niños muertos y en los cadáveres de losconejillos de Indias. El hombre que descubra este veneno, encontrará lo que yo no he podido probar”
Tiempo después, Roux y Yersin (otro ayudante de Pasteur) conjeturaron “Los bacilos deben segregar un veneno en el caldo donde los cultivamos, de la misma manera que lo hacen en la membrana que forman en la garganta de los niños, y de donde el veneno pasa a la sangre”. A lo cual Roux se dispuso atrabajar, tomó unos cuantos matraces de gran tamaño, en los que puso caldo esterilizado y después sembró cultivos de bacilos de la difteria, colocándolos después en una estufa de cultivo. Pasando cuatros días, Roux separó a los microbios del caldo con un aparato extraño, un filtro en forma de bujía hueca, de porcelana porosa, el cual deja pasar el líquido y retiene los microbios. Pero el líquido noera lo suficiente potente como para matar a los conejillos de Indias, después se dio cuenta que no dejaba el tiempo suficiente los cultivos en la estufa. Al dejarlos el tiempo suficiente se dio cuenta que el veneno era tan potente que unas cuantas gotas podían matar a una oveja.
Después entra en acción, allá en Alemania el discípulo de Koch, Emilio Behring, con la afirmación “lo único quedestruye el veneno de la difteria es el suero de los animales inmunizados o de los que han tenido difteria y se han curado. ¡Sólo ese suero es el que neutraliza la toxina diftérica!
Elías Metchnikoff fue un judío nacido en el sur de Rusia en 1845, quien desde muy joven aspiraba con ser investigador y antes de cumplir los veinte años ya había enviado trabajos a revistas científicas. A los veinticincoaños se casó con Ludmilla Feodoro-vitch, una muchacha tuberculosa que tuvo que ser llevada a la boda en silla de ruedas, pero que lamentablemente murió cuatro años después, lo cual sumió en una profunda depresión a Metchnikoff, con lo cual intentó suicidarse ingiriendo una dosis mortal de morfina, pero esta le produjo náuseas y la devolvió. Tiempo después se casó con una joven de quince años llamadaOlga y se mudaron a Sicilia junto con los hermanitos y hermanitas de Olga. Ahí en Sicilia Metchnikoff se dedicaba al estudio de la digestión de esponjas y estrellas de mar; mucho tiempo antes había descubierto en el interior del cuerpo de estos animales unas células errantes que formaban parte de sus cuerpos, pero que eran independientes, pues se movían de un lado para otro. Un día sentado a lamesa de su sala, Metchnikoff, introdujo unas partículas de carmín en el interior de una larva de estrella de mar, y con la ayuda de un lente de aumento, puedo contemplar lo que sucedía dentro de la estrella de la larva de estrella de mar. Vio como las células errantes comenzaron a dirigirse a las partículas de carmín y a comérselas, a lo cual se dijo a sí mismo
–Esas células errantes del...