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JUAN CARLOS ÁLVAREZ Javier "Chicharito" Hernández heredó el apodo de su padre y el carisma de su abuelo. El árbol genealógico del joven delantero mexicano, protagonista de la históricavictoria sobre Francia al marcar el primer tanto, está cargado de fútbol. La historia de amor de esta familia con el fútbol arranca en los años cincuenta gracias a Tomás Balcázar, un mito de Chivas deGuadalajara, que llegó a disputar el Mundial de 1954 y anotó, curiosamente, un gol a la selección francesa. Una de las hijas de don Tomás se casó con un prometedor delantero llamado Javier Hernández peroa quien todo el mundo conocía como "El chícharo" porque era pequeño y tenía los ojos verdes. Llegó a ser internacional y a formar parte de la selección que disputó en su casa el Mundial de 1986aunque el técnico no le dio ni un minuto de juego.
Del matrimonio entre el "Chícharo" y la hija de don Tomás salió un niño huesudo que a los nueve años ingresó en las categorías inferiores del Chivas. Apartir de ese momento ya sería para siempre el "Chicharito" Hernández. Tomó el apodo, el físico y la posición en el campo de su padre. Pero le distinguía de él la velocidad. Era un trueno para todo.Con sólo dieciséis años se asomó al primer equipo con el que tardó cinco minutos en marcar su primer gol en el fútbol profesional. A jucio de todo el mundo venía un vendaval. Pero una lesión cortó deforma tajante su trayectoria. Sucedió en un momento especialmente delicado: "Chicharito" se perdió el Mundial sub´17 de 2005, aquel en el que México presentó al mundo una nómina de extraordinariosjugadores que alcanzaron el título. Allí estaban Carlos Vela. Giovanni Dos Santos, Efraín Juárez…sin embargo él estaba en casa con la pierna tiesa y el mando a distancia en la mano. La fama y los contratosde los grandes clubes fueron para sus compañeros de quinta: Vela al Arsenal, Giovanni al Barcelona. Él se mantenía amarrado a Chivas y los periódicos dejaron de hablar de él.
Le costó regresar y...