claroscuros

Por Hugo Casanova Cardiel*
La educación nacional ha sido, sin duda, uno de los sustentos del Estado mexicano. A través de la educación pública, los sucesivos gobiernos de la posrevolución, lograronconsolidar su hegemonía política y, a la vez, incrementaron su legitimidad a través del cumplimiento de un encargo altamente valorado en los más amplios ámbitos sociales.
En México los logros sontan importantes como las carencias y a lo largo de nueve décadas la educación es un territorio de claroscuros. En nuestro país es posible identificar hechos educativos de vanguardia social y pedagógicacomo las cruzadas alfabetizadoras, la construcción de universidades y la obtención de premios internacionales por parte de académicos y hombres de letras. Asimismo, nombres como José Vasconcelos,Narciso Bassols, Jaime Torres Bodet, Agustín Yáñez o Jesús Reyes Heroles, ilustran momentos significativos de la administración pública de la educación en México.
Pero también la educación nacional delsiglo XX México muestra una suma interminable de rezagos y deficiencias en temas elementales: desequilibrio regional, caciquismo sindical, simulación, ausencia de exigencia y rigor. Y también, nombresque la historia se ha encargado de dejar en su sitio y que por supuesto tampoco aquí serán referidos.
Aun sin entrar a la historia de la educación, debe destacarse que en la etapa fundacional de laSecretaría de Educación Pública prevalecen la mística y la ilusión por construir una nación. Vasconcelos representa así el motor de la institucionalización educativa y  aporta los elementos básicos delo que hoy se conoce como sistema educativo nacional.
La educación nacional de los treinta se califica como socialista y la denominación alcanza al texto constitucional. La propuesta tiene unaarticulación con el mundo del trabajo, con la justicia social y con la democratización, pero entra en conflicto con un entorno político y económico muy ajeno a los planteamientos igualitarios de la...