Colombia

A)

Mientras que el realismo clásico se basa en una premisa de pesimismo hacia la naturaleza humana que es transferida para las relaciones internacionales, los realistas estructurales consideran la estructura determinadora y limitadora de las opciones y de las acciones de los agentes. Por lo tanto, muchos de los realistas clásicos, así como muchos liberales, afirman que los agentes precedenla estructura mientras que los realistas estructurales, así como los marxistas, consideran que la estructura determina la conducta de los agentes.

Proponiendo una alternativa a este debate, el constructivismo niega la procedencia de ambas estas afirmaciones para concluir que los agentes y la estructura son constituidos de manera concomitante. Para los constructivistas, ni los agentes moldan lasestructuras para servir a sus intereses ni las estructuras tienen la capacidad de limitar sus acciones. Ambos se constituyen y se influencian mutuamente.

Para Wendt, por ejemplo, además de la constitución mutua y permanente de estados e infraestructura, los procesos relacionales pueden llevar a cambios en las identidades colectivas que, a su turno, pueden modificar la lógica de funcionamientode la anarquía. Con eso, una de las premisas centrales del realismo, la acción de los Estados en defensa del interés nacional, puede ser cambiada: antes de defender el interés nacional con algo previamente establecido, es necesario definir qué es este interés, lo que remite a las identidades que están en su origen1. En otras palabras, el mundo es producto de las ideas y los valores de los agentesque lo construyen. No solo la estructura es importante para entender la actuación de la agencia, pero los agentes son centrales en el entendimiento de los fenómenos sociales, de donde deviene la centralidad de los Estados en las relaciones internacionales.

En suma, el análisis de la política exterior hoy en día no puede limitarse a analizar los efectos de la estructura en la agencia yvice-versa. En este contexto, se puede entender la teoría de Peter Gourevitch de la interpenetración de la política interna y las relaciones internacionales, así como también la de autores como Gerd Nonneman, que complejiza el debate resaltando la importancia de un análisis multi-causal, multi-level y contextualizado2.

La política externa de Colombia está profundamente marcada por el combate alnarcotráfico y las percepciones de la población generadas por las políticas adoptadas en el plano interno. Sin embargo, tampoco es posible analizar la guerra de este país contra las drogas en el plano doméstico sin considerar la influencia de factores externos, ya sea de carácter global o regional.

El "carácter inter-penetrado", como diría Gourevitch, de las relaciones internacionales y la políticadoméstica de Colombia en el tema de las drogas remonta especialmente a los años 90, cuando se consolida la colaboración con Estados Unidos como principal referencia para el combate a las drogas ilícitas. En esta época, la agenda contra las drogas ocupó una posición prioritaria para la política exterior de Estados Unidos, así como para la agenda interna de Colombia. Esta combinación de factoresfue determinante para permitir la "exacerbación de la injerencia estadounidense en el país"3.

Tokatlian y Pardo4 recuerdan como, además de agenda externa de Estados Unidos, circunstancias de carácter global y regional también contribuyeron para intensificar la relación entre los dos países en el combate a las drogas. En el plano global, se resalta que, con el fin de la Guerra Fría, el mundopasó a aceptar cada vez más el intervencionismo como una alternativa legítima para temas como la expansión democrática, la garantía de los derechos humanos, el medio ambiente, y también la lucha contra las drogas y el crimen trasnacional. En el plano regional, los autores destacan la intervención militar en Haití en 1994, que restableció en la Presidencia a un líder populista de izquierda con...