Condiciones laborales en la prostitución
Sin embargo, en otrospaíses del mismo entorno, la situación jurídica y social es diferente: en Suecia, y se persigue la adquisición de servicios, pero no la labor de las prostitutas (el llamado «modelo abolicionista»):allí, la prostitución se considera una forma de violencia contra las mujeres, y se penaliza a los hombres que las explotan al comprar sus servicios sexuales; en la mayor parte de los casos, lasprostitutas son víctimas que requieren ayuda, y se intenta educar al público, pues se considera que la igualdad en el trato hacia ambos géneros (femenino y masculino) continuará siendo inalcanzable mientrashaya hombres que compren, vendan y exploten a mujeres, niñas y niños, prostituyéndolos.
La figura de la prostituta está también estrechamente ligada a la del proxeneta, persona que recibe unporcentaje de los beneficios conseguidos por la misma.
En principio el proxeneta recibe ese dinero como pago por un servicio, habitualmente el de actuar como mediador entre la prostituta y el cliente,proveer la habitación o lugar donde tiene lugar el servicio sexual, etc. Sin embargo, cuanto más marginal es el tipo de prostitución, más se convierte el proxeneta en un mero extorsionador, que en su gradomás bajo retiene a las prostitutas bajo su control mediante amenazas y abusos que llegan a la violencia física (secuestros).
Esta situación es más habitual (y prácticamente la norma) en países dondela prostitución es ilegal.Sin embargo, la legalización no es suficiente garantía para evitar este tipo de abusos; en países europeos donde la prostitución es legal, como España, las fuerzas de...
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