Conductismo En La Publicidad Infantil
La introducción de los niños al mercado de bienes y servicioses hoy en día un hecho seguro e indiscutible. El niño es consumidor desde tres puntos de vista: como mercado primario con posibilidad de realizar compras con su dinero, como sujeto de influenciascuando sus gustos inciden en el consumo o gasto ajeno es decir el de sus padres y, por último, como mercado futuro cuando adquiere determinados conocimientos y preferencias sobre marcas y productos quetodavía no están a su alcance, pero que en un futuro las utilizará.
El conocimiento de la forma del pensamiento de un niño permite al fabricante y al publicista, no sólo crear productos que seadapten a las necesidades y gustos de los niños, sino conocer los mecanismos que pueden llevarlos al consumo.
Comenzando por la atención que el niño presta al mensaje o publicidad, las mismascaracterísticas fisiológicas del cerebro del niño lo hacen receptivo a cualquier estímulo, además de encontrarse en una fase en la que la curiosidad es característica fundamental, sin importar demasiado laretención de la atención inicial. Esto lo hará ávido receptor de mensajes estimulantes, incluidos los publicitarios.
El sincretismo que es otra característica del pensamiento infantil tiene también susconsecuencias en relación con la captación de mensajes publicitarios. La participación de un niño en la publicidad tiene como consecuencia, en primer lugar, el no saber abstraerse del espectáculo que lellama mucho la atención, y en segundo lugar, que sea incapaz de reconocer un límite entre la realidad y la fantasía, aceptando, en consecuencia, como verdad, cualquier cosa que se le presente....
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