contemporaneos




Hablar de literatura contemporánea en Girardota es una forma de definir el tipo de escritura, que no se dedica a la mención de los eventos y sucesos que implican imaginarios colectivos sino que es lo que recientemente se ha producido y que revela una búsqueda más intimista por resolver preguntas sobre la existencia propia y lo que implica: el amor, la edad, la muerte, el dolor, laangustia….

Más allá de las definiciones conceptuales o cronológicas sobre lo que ha significado.
Literatura contemporánea aquí será abordada desde algunos testimonios recibidos por personas que le han dedicado gran parte de su vida a la literatura o para quienes representa un modo de llevarla. Esto es el producto de una conversación con Gloria Pérez, Julián Ospina, Juan Felipe Ospina y Pedro ArturoEstrada.


Maria Goria Peréz Tobón: ¨Quizás un maestro sólo sea una persona que facilita, que pone cosas delante de la gente y muestra cuán emocionantes y maravillosas son, incitando a probarlas".1
Dirigió durante 8 años (1999-2007), el taller de literatura ¨Como Saetas¨en Comfama de Girardota. Este taller fue precursor del taller de literatura ¨En a las del libro¨ y de la investigación sobrepatrimonio literario ¨Y la Palabra nos nombra¨que da lugar a este rastreo que intenta poner algunas luces sobre lo que ha sido la Literatura en este lugar.
Maria Gloria define la literatura como su refugio y como la posibilidad de compartir el cuento de la palabra. La vida es una historia, un cuento y a todo el mundo le gustan los cuentos. El cuento de la vida¨ lo compartió con los muchachos queiban a los talleres. A continuación una historia que leyó y escribió en su taller de literatura.


HISTORIA 2:

Esta muchacha de inmensos ojos negros está a punto de graduarse como historiadora, su trabajo de grado se centra en el análisis del funcionamiento de las élites de su pueblo natal entre 1890 y 1930. Un escrito suyo sobre el partido conservador en el municipio de Girardota, ha sidopublicado en la revista del Departamento de Historia de la Universidad de Antioquia. La agudeza de su negro sentido del humor da cuenta de su inteligencia, que le ha permitido recibir distinciones como la de la matrícula de honor por ser la mejor estudiante de su semestre.

Cuando la conocimos era una tímida adolescente agobiada por su limitación física. Era un privilegio escuchar su voz, para entoncescasi inaudible. El incondicional amor fraterno de una de sus compañeritas de colegio, que desde que la conoció se convirtió en su ángel guardián, le permitía quedarse con los otros jóvenes porque al lado de ella se sentía segura. Su papá la traía y la llevaba hasta el día en que le robaron el viejo Toyota verde. Ana y su buena amiga nunca faltaron al taller, casi se enojaban el día que por cualquiermotivo no nos podíamos reunir. Yo las veía venir, dos niñas de colegio, una morena y fuerte, llena de vitalidad, sirviendo de apoyo al frágil cuerpo de su amiguita de ojos negros. Cada jueves me conmovía esta escena y pensaba: “Quién fuera pintor, quién fuera poeta para pintar, para cantar esta oda a la amistad”.

Su enfermedad, de tipo degenerativo, iba restringiendo cada vez más sus débilesmovimientos físicos. Un día le pregunté: “¿No has pensado en la silla de ruedas?” y me respondió: “Sí, pero no quiero porque sé que si mi siento en ella, nunca más volveré a pararme”. Pero a la vez que su enfermedad avanzaba y su cuerpo se debilitaba, su temperamento, y sobre todo su desarrollo intelectual se iban acrecentando, agrandando, fortaleciendo. Hoy, además de poder leer sus ponencias, aveces nos invitan a charlas o tertulias con temas literarios o históricos donde una de las ponentes es Anita. La vemos llegar, conducida la silla de ruedas por su papá o por su “amiguita” del colegio (convertida también en una profesional de las ciencias humanas).

He llamado a Anita para que me perita hablar de ella en estas crónicas y le he solicitado que me responda esta pregunta: “Cómo te...