Controversia sobre el aborto

Aborto, controversia constitucional
• Entran al quite el gobierno federal y Derechos Humanos
• Atrás, el clero como uno de los factores reales del poder
• No se resigna Vicente Fox al anonimato, se cree presidente
• Severa etiqueta a Salamanca, la más contaminada del país
• Todavía no hay quién le entre a la delegación de la PGR
Hugo Chávez Banzer
Por donde menos se esperaba llegó larepuesta del bloque de la derecha contra la izquierda en el tema de la despenalización del aborto, nada menos que una controversia constitucional promovida en "la tremenda corte" por el gobierno federal que lleva de socio a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, lo que descalifica el debate y el trabajo que se dio en la Asamblea Legislativa chilanga y traslada el asunto a un foro nacional.Una primera reacción del gobierno federal fue la negativa del IMSS a realizar los abortos en sus hospitales del DF con el argumento del director general Juan Molinar Horcasitas de que tal práctica médica no estaba en el catálogo de los servicios que ofrece la institución, lo que dejó sólo a 14 hospitales bajo control del gobierno chilango en condiciones de interrumpir embarazos con menos de 12semanas de gestación de los que al momento y al amparo de la nueva ley se habrían practicado 260 y programado otros 600.
Lo que para unos es un avance en materia de derechos sociales de las mujeres, se veía frenado sólo por voces fundamentalistas como la del jefe de los calzones de Provida, Jorge Serrano Limón, sin ninguna autoridad moral para intimidar a médicos y enfermeras; en este sentidopesaba más el anatema del alto clero que amagó con la excomunión a todos los que participaran en un aborto, lo que incluía además del paciente hasta los farmacéuticos, pero esto de la controversia constitucional plantea un problema político mayor.
Cabría esperar que en "la tremenda corte" el debate caminara en otros parámetros de la salud pública y no sólo los problemas de conciencia o la intoleranciade la ultraderecha, pero por desgracia lo que se filtra es la cada vez mayor dependencia o subordinación de los ministros de la corte ante la presidencia de la República, al punto que a un par de ellos ya les dicen los pizzeros, que porque se tardan menos de 30 minutos en llegar a Los Pinos cuando así se los piden para tratar asuntos como éste.
Parecía que en el tema del aborto habría una treguapara darle al tiempo oportunidad de valorar la reforma, si ésta ayudaba o no a contener la elevada incidencia de muertes entre las mujeres que con y sin permiso de la ley, antes o después de 12 ó 14 semanas de gestación interrumpían el embarazo en manos de personal sin capacidad profesional, plazo en el que brincarían omisiones o imprecisiones como las que ahora se invocan para anular la reforma.Al parecer, con el mismo problema de salud pública estamos de regreso al debate ideológico, a la preeminencia de los varones sobre las mujeres, a la definición del peso específico de los factores reales del poder, en este caso del clero, el gobierno de la iglesia que no la comunidad de los fieles que se siente lastimado en su autoridad porque además del aborto tendría que soportar reformas queigual van contra sus principios como el tema de la eutanasia que ya está en la mesa y lo que sigue.
Felipe Calderón Hinojosa
Otra vez "la tremenda corte" entra a legislar, a reemplazar a otro de los poderes, la emplazan en un mal momento, justo cuando circulan encuestas en las que la población percibe que ocho de cada diez jueces son corruptos, una calificación más severa de aquel otro estudio dela ONU en el que afirmaron que seis de cada diez jueces subastaban la justicia y las denuncias de la baja burocracia indignada por las reformas a la ley del ISSSTE, en las que denuncian lo injusto de que un magistrado gane en un mes lo que cualquier otro burócrata percibe en un sexenio.
No será el tema del aborto sino la relación y la competencia entre poderes lo que recale de este asunto en...