¿Cuál será más de culpar, la que peca por la paga o el que paga por pecar?

Universidad de Nariño
Facultad de Artes | Diseño Industrial
Juan Felipe Caratar | Esteban Villota

¿Cuál será más de culpar, la que peca por la paga o el que paga por pecar?
La falta deoportunidades en una ciudad tan pequeña como lo es Pasto limita de gran manera las opciones que tiene cualquier persona para encontrar la manera de ganarse la vida, las personas de esta ciudad siempre buscansalir adelante y muchas veces las decisiones que toman para este fin no son las más adecuadas por diferentes factores que inciden dentro de la sociedad.
Las mujeres siempre han por naturaleza másemprendedoras y buscan la forma de salir adelante ellas mismas y de sacar adelante a quien los rodea, teniendo cualidades tan importantes y grandes, las mujeres siempre encuentran la manera de ganarse el pande cada día.
Pero qué pasa cuando la sociedad, ya sea por simple capricho o porque de verdad la situación es demasiado difícil, que pasa con estas mujeres que lo único que pueden tener es la urgenciapor salir de alguna situación difícil, esas mujeres que por el contrario a los hombres que generalmente son quienes buscan ganarse la vida fácil y sin problema, sin ética ni moral que los respalde.Entonces aquí, cuando la situación no da para más y una mujer que cuenta con necesidades como todos pero que seguramente no es estudiada, no viene de la ciudad, no cuenta con casa, o incluso ni concomida, que incluso puede tener hijos a quienes alimentar y que vestir, que se supone que debe hacer ante esto, ante una sociedad que la rechaza por “bruta” o por “pueblerina”, incluso en ocasiones porqueno tiene “el físico” para verse bonita en una minifalda y poder trabajar.
Cuando estas mujeres se encuentran contra la espada y la pared, cuando ya no les queda otro camino y cuando sus horizontes decierran antes sus ojos, entonces aparece el lado oscuro de la sociedad, ese lado que si tiene oportunidades para ellas, ese lado que no le importa cuanto haya estudiado o de donde venga, que no le...