Daniel Cassany
En el texto, Daniel Cassany, el autor, señala algo fundamental: hay que quitarnos el miedo de escribir. Muchos escritores aclamados por su buenaprosa recomiendan lo mismo. No hay otro secreto para escribir que empezar a hacerlo. No discrepo.
Yo, escritor de historias, he gastado un buen rato revisando los consejos que los escritoresexitosos nos dan a los recién iniciados en el oficio de la pluma y los procesadores de texto. Escribir la mayor cantidad posible es importante porque así aprendemos a corregir nuestros errores. Cuandotermino de escribir un relato, dejo que mis palabras resistan al paso del tiempo –un par de semanas- para revisarlas y editarlas. El texto es como una roca. Yo soy el escultor. Quito y reemplazo adjetivos,añado espacios, vacíos. Encuentro el sonido que me gusta. Un ritmo. De esta forma encuentro mi voz. Mi estilo: así es como quiero que me lean.
Dependiendo del tipo de relato, varío en mi forma deredactar. Cuando quiero que mis palabras lleguen rápidamente al lector y generen un efecto inmediato, utilizo frases cortas. Son más directas. Estructuras simples para la oración: sujeto, verbo ypredicado. El ladrón escapó con el botín. Roberto Velarde mató a un gato por primera vez. Usualmente, revelo el conflicto de la historia en las primeras líneas. Hay que dar lo mejor de lo que tenemosdesde el principio. Sólo en el que caso de que la parte final de la historia pueda ser lo suficientemente genial –la revelación del sentido de un cuento, por ejemplo-, podemos entregar nuestras ideaspaulatinamente, a un ritmo intermedio, hasta llegar al éxtasis final. Pero, ¿qué pasa si el lector no llega hasta ese último punto que cierra la historia? Para que eso no ocurra, es importante ‘poner todala carne en el asador’ de arranque.
Cuando quiero que el texto se luzca por el uso del lenguaje y su estructura, escribo oraciones largas. Pero prefiero usar palabras simples, siempre. Sólo como...
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