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BIENESTAR DEL PARAMÉDICO
Nadie puede dar lo que no tiene: promoviendo el bienestar del paramédico
El mantenimiento de la paz comienza con la autosatisfacción de cada individuo. Dalai Lama
Elhombre es por naturaleza un ser complejo, y si se trata un sujeto dedicado a la atención pre hospitalaria o de emergencias, esta complejidad se duplica.
Los aspectos emocionales en la atención deemergencia se particularizan en dos grandes ramas:
El soporte emocional para el paciente o su familia al momento de una crisis, para ayudarle a  recuperar su balance emocional.
El auto cuidado delprofesional de la salud para mantener un estado de equilibrio ante las crisis, las emergencias  y las situaciones laborales cotidianas.
En el presente texto nos focalizaremos en este segundo apartado,denominado comúnmente como el “bienestar del Técnico en Urgencias Médicas o del Paramédico”.
Debemos contemplar al ser humano desde una perspectiva “biopsicosocial”, entendiendo que la interacción de losfactores biológicos, psicológicos y sociales es la que interviene en el desarrollo del individuo; por ello, es necesario que el paramédico se encuentre en plenitud en los aspectos físico, emocional yen lo competente a relaciones interpersonales, para ser capaz de ofrecer a los pacientes un servicio dotado de calidad.
Siguiendo por esta misma línea, la Organización Mundial de la Salud define elconcepto de salud como “Un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades” (OMS, 1948), lo que remarca la importancia a que losprofesionales de la atención pre hospitalaria se preocupen por el auto cuidado y por identificar las señales de alerta ante aquello que pueda afectarles en su bienestar.
En el actuar cotidiano del paramédicoson muchas las situaciones relacionadas con  escenas peligrosas, choques o volcaduras graves, incidentes con múltiples víctimas, lesiones en infantes, daños o accidentes a algún compañero entre muchas...