Democracia liberal

Democracia Liberal
Juan Carlos Jaime Salinas.

Hoy en día, nobles voces aseguran que se transita en el sendero de una democracia liberal, opinión que no comparto, pues en su concepto de“democracia liberal” vislumbran de manera vaga y utópica la relación del binomio sociedad–gobierno, olvidando aspectos fundamentales, significativos y vitales para fraguar una democracia liberal, como son: lapobreza, la marginación, la corrupción y el rezago educativo, cuyos efectos generan descontento social y una falta de compromiso ciudadano, menoscabándose la relación entre el pueblo y su gobierno.Cuando mencionamos el término “democracia”, lo entendemos como una forma de gobierno, un Estado organizado donde la voluntad de las mayorías prevalece en un plano de igualdad y libertad entre susciudadanos, electoralmente hablando, podría ser robustecido con la existencia de procesos e instituciones electorales cada vez más confiables y transparentes, donde la ciudadanía busca informarse paravotar deliberadamente y, un ciudadano cada vez más participativo y crítico en la aplicación de las políticas públicas. Ahora bien, el papel de las instituciones electorales federales y locales en Méxicoha sido responsable, pues en ellas se garantiza y descansa la credibilidad de los mexicanos al ser informados, velándose y tutelándose sus derechos político-electorales, apegando estos fines alartículo vigésimo primero de la Declaración Universal de Derechos Humanos, aprobada y proclamada el 10 de diciembre de 1948, la Constitución Política de los E.U.M. Constituciones Locales, Códigos ElectoralesFederales y Locales, además de leyes y reglamentos aplicables en materia. Pero entonces, aún sería erróneo acentuar aquí una identificación completa de “democracia liberal” pues no podemosconcretarnos a describir y proteger al ciudadano en sus derechos políticos si olvidamos también sus derechos cívicos, pues estaríamos creando “zombis sufragantes y no ciudadanos de calidad comprometidos con...