discurso despedida

Queridas compañeras:
Hoy, después de doce años, decimos adiós, pero es un adiós que no significa un "hasta nunca", sino que va lleno de un eterno "hasta luego" que refleja esperanza, ilusiones,deseos, sueños, anhelos y por qué no, también miedos.
"¿A qué le temes?", me preguntó alguien hace unos días. Yo creo que le tengo miedo a lo mismo que la mayoría de mis compañeras: le temo a todo lo queviene. Que si llego a reprobar EN MIS ESTUDIOS SUPERIORES O NO, que si no comprendo mis cambios en esta etapa de la adultez que si esto, que si lo otro... Y podría continuar con la lista de lo quemuchos tenemos miedo; pero creo que hay algo todavía más importante: una ilusión que lo compensa todo: crecer.
Dar un paso hacia una nueva etapa, que no precisamente tiene por qué ser mala, sino quetambién creo, será una época cargada de nuevos aprendizajes, intelectuales, pero también para la vida diaria; llena de nuevas personas que serán nuestros guías, sin dejar a un lado las enseñanzasprincipalmente la de nuestros padres y también las de nuestros profesores.

Profesores "hasta siempre", porque estoy segura que siempre los llevaremos en nuestros corazones y mentes .Gracias porqueganamos, además de conocimiento y experiencia, recuerdos imborrables .Ustedes quienes depositan aquí esfuerzos, alegrías, frustraciones y recuerdos. Y en esto, hay que decirlo, es donde algunos realmentese han esmerado, Más allá de estos esfuerzos denodados me consta que ustedes, con sus vivencias y empeño, han colocado y unido cada día los ladrillos de la base de esta pirámide, sabiendo que cuantomás fuerte y amplios son sus pilares más sólida es su estructura, y que nos han enseñado a los que venimos después a hacerlo y perpetuarlo. Se los agradecemos porque sabemos que han buscado hacerlocon conocimiento, comprensión, y principalmente, con el cemento más fuerte de todos: el amor por lo que se hace.
Como dijo Para Celso: «Quien no conoce nada, no ama nada. Quien no puede hacer nada,...