El carácter multiétnico y pluricultural de la nación y su ineluctable reconocimiento en la constitución de 1991.

EL CARÁCTER MULTIÉTNICO Y PLURICULTURAL DE LA NACIÓN Y SU INELUCTABLE RECONOCIMIENTO EN LA CONSTITUCIÓN DE 1991.

Juan José Navia Garzón.
Introducción:
La Asamblea nacional constituyente emprendió, en sus deliberaciones, la plausible tarea de consagrar en la preceptiva de la proyectada ley fundamental, el carácter multiétnico y pluricultural de la nación colombiana. Tal objetivo fueesbozado por el entonces presidente César Gaviria Trujillo cuando convocaba a trabajar sobre “una asamblea constituyente de todos los colombianos y proponer la declaración del carácter multiétnico de la nación”. Fue la génesis de un Estado garante de la igualdad de los distintos grupos sociales habitualmente excluidos como los indígenas y Afrodescendientes, y reconocedor de la igualdad de cultos, ladiversidad sexual y el papel de la mujer en la sociedad, vulnerado por una constitución (la de 1886) que aupaba la misoginia de la religión preponderante.
Nos atañe pues dilucidar en el presente ensayo que, la confluencia en un territorio de diversas culturas vernáculas debe necesariamente redundar en el reconocimiento constitucional de la pluralidad étnica y cultural de la nación. Siendo lacultura, tal como la define la antropología cultural “un conjunto integrado de modos de hacer, actuar y pensar, desarrollados y/o adoptados por una comunidad como solución para las necesidades de la vida humana asociativa”(Enciclopedia temática Discovery, 2004); carácter que la posiciona (a la cultura) como un insoslayable factor real de poder, esto es, en palabras de Lasalle “esa fuerza activa yeficaz que informa todas las leyes e instituciones jurídicas de la sociedad en cuestión, haciendo que no puedan ser, en sustancia, más que tal y como son”. (¿Qué es una constitución?, 2004).
Nos remitiremos entonces, para versar sobre el planteado tópico, al periodo de la conquista, que sería, caldo de cultivo idóneo para la amalgama de culturas heterogéneas cuyo resultado sería la proliferaciónde singulares mezclas raciales, pero de igual modo, la imposición luctuosa del pensamiento europeo que eclipsó, como lo expresa el filólogo Ezequiel Uricoechea (neogranadinas, 1854), “el carácter y grado de perfección intelectual” de los artífices y moradores de la civilización indiana, y de manera más infausta a los Afrodescendientes. Todo este discurrir histórico signó el reconocimiento étnico ycultural de que aquí se trata, no como consecuencia del quietismo en el positivismo evolutivo spenceriano, sino como el producto de la exigencia de los derechos al calor de la lucha (como diría Marx), de la desobediencia civil y la protesta pacífica, medios estos adoptados por la nación, dada la incongruencia de la constitución real o “sumatoria de los factores reales de poder imperantes en unasociedad”(¿Qué es una constitución?, 2004) y una constitución escrita obstinadamente excluyente y soslayadora de, como lo señaló Alejo Carpentier, “la fecundidad intelectual de los mestizajes, de los intercambio de sangre, tradición, rutas y costumbres” (Carpetier, 1.977).
Desarrollo del tema.
El 4 de julio de 1991 ante la coyuntura de una crisis de legitimidad de institucional, se expide, lanueva constitución política, emergida como producto de la propuesta de plebiscito suscitada por movimientos estudiantiles la cual abrió paso a la convocatoria de una asamblea nacional constituyente en la que participaron distintos grupos sociales, culturales, civiles y políticos, quienes concertaron en el marco del llamado “constitucionalismo de tregua”, las disposiciones constitucionales queregularían la vida política del Estado.
Los logros descollantes de esta constitución son, el avance en materia de derechos individuales, amén, de derechos económicos, sociales y culturales y de la colectividad (no en solo su declaración, sino en la creación de garantías que los aseguran); la búsqueda del equilibrio de poderes; la elección popular de alcaldes; pero, en primera instancia (dado que es...