El costo de la vida

El precio de un día y otras tarifas

Parece el sonido que reproduciría una piedra contra los dientes pero es el televisor que sin falla enciende como ayer, como antes de ayer, y como el primer día después de las vacaciones diez minutos antes de las seis, me despierto y por inercia puedo estirar mi brazo que alcanza la toalla en su lugar que es el mismo de siempre porque el espacio en lahabitación es cada vez menos, inversamente proporcional al de su precio; la cosa esta cada vez más difícil, dejó escapar la otra tarde la señora Aurora docente jubilada, que alquila tres de las habitaciones de su casa y además lleva sobre su espalda el duelo de una pensión de sobrevivencia. Todavía no salgo de la habitación y en mi mente se revuelven tantas ideas adormecidas y sé que es el mismosentimiento que tienen todos cuantos se han ido de sus casas y diezman de sus sueldos o el de sus padres el calor de cuatro paredes tan frías y grises que no brindan nada más que un quinto de felicidad.
Con el desmán de la hora la ducha es una metáfora. Salgo a la calle lista para otro día en la universidad, son las siete de la mañana y me percato de la cantidad debitada de la cuenta bancaria, esexactamente la que me permitirá llegar a la primera clase.

Mal llamada viveza criolla
Anoche entre el trinar del twitter y los gritos de unos pocos supe de la publicación de la edición aniversario de El Nacional por la cual pregunto al señor del kiosco azul, por un momento pensé que todos los kioscos de periódicos son azules, ¿será una estrategia de mercadeo?, no se pero sea por lo que sea el viejode cabellos y sonrisa blanca me dice que no le ha llegado, aunque a mí me pareció ver una torre apilada en el piso del ejemplar que le pedí, avanzo unos metros hasta el borde de la avenida, antes de cruzar siento los mismos nervios que las infinitas veces anteriores, son seis canales de riesgo y unas cuantas motos fantasma de esas que aparecen de entre los carros.
Una vez del otro lado me doycuenta que es tan tarde para que el camión que hace entrega del periódico a los pregoneros no haya llegado que pienso en nunca comprar una sola letra a ese que me había negado esa ración de historia que fuera El Nacional; un autobús grande y rojo pasa y como si fuese una carroza no hace la parada y sigue aun con solo dos o tres puestos ocupados, lo sigo con la mirada hasta dar media vuelta y es ahícuando leo el rotulado en la parte trasera que dice “con Amalia Barquisimeto avanza”, así que pensé que ella y Barquisimeto de seguro estaban en la próxima parada y si otros usuarios viajábamos en el Yutong, esa es la marca del autobús, o cliford como el perro de la caricatura, por lo de grande y rojo, ellos no tendrían lugar para sentarse. Mi amiga tuitea una foto del mismo paquete que anteshabía visto, era el periódico y el señor del kiosco haciendo uso de uno de los patrimonios intangibles de por estos lados, la viveza criolla no me hizo la venta que haría a otro de sus clientes fijos tal vez al precio de “aprovecha la situación”.


Desayuno, almuerzo y cena
En la alcabala cuatro de la Universidad Fermín Toro cuya escalera me llevaría a el aula de clase, veo una hoja en la pared quedice: “mantén limpias tus manos”, debajo un dispensador de gel antibacterial indudablemente útil después de que en un carrito por puesto incluyeran además de un corto viaje, lo que llamo fragancia 91 y todo por siete bolívares. Para ese día el desayuno que ya se había divido como las compras en los supermercados, la bebida aquí porque es mas económica y la empanada allá porque es más grande,aumentó, quise un café, late porque el olor a vainilla no me agrada mucho en el café, mocaccino resultaba muy dulce para la hora, en fin lo que quería era una dosis de energía, no la que me suministro la cajera del local con la cuenta, mi desayuno había costado lo que un pasaje para ir a visitar a mi mamá.
Antes de que pasara al menos medio día una frase pasa frente a mis ojos y pienso que me...