el espejo puede metir no muestra lo que hay dentro

Muchas de nosotras no nos sentimos bien con nosotras mismas, siempre nos comparamos con otras chicas, siempre pensando que podríamos cambiar y nunca aceptándonos como realmente somos. ¿Por qué? ¿A quién podríamos echarla la culpa? ¿A la sociedad que se ha convertido en alguien superficial y perfeccionista? ¿A nosotros mismos por hacer caso de todas las cosas que solemos escuchar? Nadie sabe conexactitud qué nos ha llevado a ser tan superficiales, tal vez ver en la televisión esos cuerpos casi perfectos, todos esos productos para ser más ‘bella’. Toda esa ropa que cada vez es más pequeña y te hace pensar que eres tú la que tiene una talla equivocada. Es irónico decir que la perfección no existe pero la palabra todavía sigue existiendo.

Ser adolescente es muy difícil. Según nuestrospadres nuestro único deber es estudiar, sacar buenas calificaciones y construirnos un futuro. Para ellos están claras las metas que nosotros tenemos que conseguir, pero, ¿por qué no piensan en lo fácil que es desviarnos del camino? ¿Por qué no nos enseñan y preparan para lo que es salir al mundo? Nunca piensan que podríamos sentirnos mal, nunca piensan que podría pasarnos algo porque nosotros somoslos hijos que nunca podrían tener nada. ¿Están equivocados? ¡Demasiado!

—Gorda, idiota, inútil …—susurrabas mirándote delante del espejo—gorda, gorda, gorda.

Venir del instituto y ponerte delante del espejo para menospreciarte a tí misma ya se había convertido en una cosa totalmente normal en tu día a día. En el instituto aguantabas a tus compañeros y en casa te destrozabas tú misma. Nosabías cómo habías llegado a todo eso, no sabías cómo ha pasado pero ahí estabas, en el espejo, viéndote obesa, totalmente obesa cuando probablemente no deberías de pesar más de cincuenta kilos.

—Si no fueras tan obesa tal vez tendrías alguna amiga—apretaste los dientes enfadada—eso te pasa por haber estado comiendo todos estos años, sí, eso te está pasando.

—¡Hija baja a comer!—escuchastegritar a tu madre.

—No tengo hambre—contestaste.

Para tu madre era una costumbre que no comieras ninguna vez delante suya, ella trabajaba muchísimo para poder mantener la casa y todos los gastos ya que era madre soltera. Casi nunca estaba en casa así que nunca preguntaba si habías comido o no, nunca sabía si eras sincera con ella o no. Pero no le quedaba de otra que creerse y aceptarlo. Eras unachica muy madura que nunca mentiría a su mamá.

Para tí, el único consuelo que tenías era la música y el internet. En ciertos lugares como twitter o tumblr te sentías más o menos cómoda. Nadie te conocía como para decirte si estabas gorda o no. Nadie sabía si eras fea o no. Nadie sabía si eras simpática o antipática. En esas redes eras quien eras y en cierto modo te aceptaban. No toda la gente,siempre hay imbéciles que hacen sentir mal a otras personas pero normalmente eran una como una ‘familia’ que se apoyaban unos a los otros.

—Hija—llegó tu madre a la habitación—¿qué haces? Estás todo el día metida en esa maldita computadora sin hacer nada. ¿No tienes deberes? ¿No estudias? ¿No sales con amigos? ¡El día es tan bonito! ¿Por qué no vas a comerte un helado o a respirar un poco deaire fresco?

Siempre era el mismo discurso antes de irse a trabajar, ¿por qué no te dejaban en paz todos de una vez y te dejaban vivir a tu manera? No tenías amigos, no tenías a nadie, claro está que ella no lo sabía, ¿cómo iba a saberlo? Para ella eras la hija que estaba perfectamente y que vivía una vida feliz. ¡Yuju! ¡Qué feliz estabas!
Cuando salió de tu habitación diste un suspiro ypusiste música alta para poder perderte en ese mundo donde todo por unos minutos era perfecto. Solías escuchar a ‘One Direction’ pero no te considerabas fan, para nada, simplemente escuchabas sus canciones, ni siquiera podías diferenciarlos si se ponía el problema. Y también Demi Lovato, para tí ella era un modelo a seguir, había pasado por tantas cosas y ahora estaba tan sana y salva. ¿Tendrías...