Esayo

PROBLEN4ATICA ACTUAL 327

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y los intereses propios d envad os de la ganancia de un honorario, qu e se estima causa de la venalidad y la mala fe procesal. Su rehabil itacion relativa posterior en la U.R.S.S. muestra una am. bivalencia que posiblemen te tenga fu ndamento en la diflcil in. sermon de los prolesionales en la teoria de las clues dmeata ten- dencia, ya que at vincularactividades con medios de producci6n, carecia de un lugar especlfico para aquéllos. Podian ser tanto ca- pitalistas ( pero no son propietarios de medios de
ut:leno-
como traba;adores I pero sus relaciones con superiores e
res, los trabajos que realizan y las recompensas que recogen no ajustan a los de esa categorfa social) . Marx no les habla presta-
‹to atencion initial, por su irisignificanciaen e1 proceso produc- two y por su reducidD niimero. La evoluci6n de la teorfa llev6
considerar, luego, que dentro de los palses ca pital istas se cum- plen funciones ideol6gicas, de represi6n, de conduct i6n y de su- perv i$i 6n de la clase trabaj a dora. in este panorama, la profe— sun legal se encuentra generalmente vinculada a ellas: per e1 control social (derecho penal) , las relactones de producc i6n ( de- recho laboral) y relac tones en tre corners iantes y corporal iones ( derecho comercial y parte del international privado) .
in un purr to coinc iden la teoria critics con los estiid toe fun- cionales sobre la abogacia: la crec iente proletarizacion de la pro- fesi6n, aunque las causas de J as nue deriva nan son diversas. El ana lisis moderno de laprofes ton Jega1 desde el punto de vista critico lleva a la determinaci6 n de nuevas funciones que los abo- eados pueden cumplir en una sociedad capitalista ( depend iente o independiente I , at tomar concie ncia de 1 a situaci6n de clase, o asum ir volu ntariamente la defensa de los estratos desposeldos. A esto apuritan los tern as que a continuaci6n setratan: el acce- so a la justicia, el discurso jur id ico, el uso alternativo del dere— cho y la Eritrea at prcx:edim iento jud icial.

2. El acceso a la |usficia.

El tern a del acceso a la ju st ieia, d esde ct purr to de vista so- ciologico, deriva de la confrontac ton entre las expectativas que surgen de la ley (para la cua I todos los ciudadanospuedan acu- d ir a los triburia les en defensa de los derechos, y de igual ma- nera se encuentra gara: tizad a la defensa en ju icio) y las con di ciones reales de ta1 acceso y de la supuesta defensa. El tema pue- de ser tratado, y to ha sido exten same rite, desde la optica gene- ra I de la soc iologia jurid tea, incluso como disfunc ionalid addel sistem a. y ta1 tratam ten to no supone una sociologia crltica. No es necesario adscr ibir a esta posic i6n para reconocer que e1 dereCho de acceder a la justicia se entendiG trad icionalmen te como u n
derech o natural” nue tent an las personas afectad as para litigar o defen derse, es deem. como u n derecho del cual el Estado si5lo

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COC\OLQC JD DEL.DERECHO

debla impedir, también formalmente, en violation. En este con- texto at Estado liberal no Ie concernia auxiliar la indigenc ia ju- ridica, ya que, segiin esta ideologia, toda ind igencia es exclusiva responsabilidad del indigente (Cappelletti-Garth, 1983:19I .
Es deem que las posibilidades designates pata litigar coristi- tuyen. un tema que interesa a toda la sociologiajuridica, en cuan- to muestra una ruptura entre la declaraci6n formal de un dere- cho y su alcance real. findo litigar —y puede hacerlo-— el que tiene, entre otras cosas, recursos de variado tipo, los in:is d e los cuales dependen de su posici6n soc ioecondmica y educacional. Its problemas que fueron estudiados en el campo general se re- fieren at alto costo del proceso, que hacen de muy...