“Fundamento Perenne En La Obtención De Licencia, Congruencia Entre Lo Dicho Y Lo Hecho...”

Abriendo ventanas de la escuela con licencia al colegio de esencia
Por Santiago García Gutiérrez


“Fundamento perenne en la obtención de licencia, congruencia entre lo dicho y lo hecho...”


Cada feria que en el mundo promueve y licita los nuevos productos que combatirán comercialmente y que llenarán escaparates de sociedades cada vez más materializadas desde hace yaalgunos años, tienen un factor que hermana a todas las impactantes justas que une cúpulas de empresarios, inversionistas, ejecutivos y expertos del cada vez más agudo y controversial mundo del “business”. Obtener la licencia, marca o autorización de quienes venden ideas, conceptos, especulaciones y con ello garantizan ventas, negocios redondos, fortuna sin igual.


A diferencia de esemacabro espacio comercial de quienes se deleitan en el mundo de la piratería y que con probadas evidencias, pueden ser emporios superiores a muchos de los que día con día gastan cuantiosas sumas en impuestos gubernamentales, los típicos personajes inicialmente citados, después de una acalorada junta, subasta o confrontación, de entregas de regalías, buscan por todos sus medios obtener el tanpreciado permiso que se traduce en un documento legal, carta compromiso y hasta acuerdo bilateral para el próximo periodo, ya que existen variadas propuestas que quieren llevar en sus productos el holograma de autenticidad, producto oficial de y hasta la firma o imagen corporativa. Con esto la licencia se convierte en cierta forma en una garantía, certificación o respaldo social que garantizará ventas,ventas y más ventas.


Con ambas realidades confrontadas es menester de este particular ejercicio de reflexión, vincular, marcar similitudes, afianzar discrepancias por lo que será punto de referencia inicial, la culminación del Congreso Nacional de Educación en el majestuoso paraíso de Tonatico, Estado de México, en donde otros agentes de este mundo globalizado son los líderesnacionales de otra tan cotizada tarea social, desarrollada con lingotes presupuestales, más que pedagógicos, y que a pesar de todo hacen una proclama: “Educar es el camino” y con ella la reiterada solución de todos los problemas, la educación. Pero es ahí donde este espacio de reflexión pretende hacer eco, alarido, ruido que despierte una verdadera coalición de profesionales de la educación en sectoresprivados y públicos, empresariales y burocráticos, que crean que de la licencia laboran, de la marca institucional, urge retomar la esencia colegial, académica, de confrontación con nuestra filosofía y principios rectores.


Atendiendo al principio de la predicación, que marca, iniciar por la propia casa, es útil remembrar una experiencia eclesial, que pudiera ser retrato continuo decientos y hasta miles de encuentros, congresos, coloquios, y demás actividades en pos de la educación, sea con tintes religiosos, sindicales y hasta empresariales. En el Congreso Mundial de Educación convocado por la OIEC en 1994, en la ciudad de Roma, bajo la meta de promocionar la Escuela Católica como factor de cambio humanístico, nos reunimos cierta noche el Padre Tacamba representante deUganda y un servidor a librar una discusión sobre la sinérgica labor de nuestras instituciones, por ese tiempo mi representación obedecía al trabajo desarrollado en el Colegio “Maria Curie” de las Siervas de Jesús Sacramentado en La Ciudad de México; el Padre Tacamba abanderaba todos los esfuerzos de la educación católica, de su Confederación en este impactante país africano.


La mesa dedebate y análisis fue contundente: ¿Qué hace que nuestra oferta educativa como colegio católico, sea en nuestras culturas, tan buscada, aceptada y en algunos espacios abarrotada? Razones, argumentos y evidencias sobraron, sin embargo viene bien resaltar un elemento, ingrediente que puede resultar alentador o enigmático, área de oportunidad para nuestra misión o inercia de un mundo postmoderno....