ing. geologica
CAMPOS TECTONICOS
12
DE TENSIONES
Las formas estructurales secundarias, tanto las coherentes
como las disyuntivas. representan en si el resultado de las defor
maciones de las rocas. Las deformaciones son provocadas por ten
siones de origen tectónico. Consiguientemente, puede plantearse el
.,problema recíproco": según las deformaciones que se observan
restablecer aquelcampo de tensiones tectónicas que engendró estas
deformaciones.
La solución de este problema tiene no sólo interés teórico, sino
que también práctico: el conocimiento de las direcciones en Jas que
actúan las tensiones de compresión y tracción permite pronosticar
el carácter y la orientación de las formas estructurales que hasta
ahora no se observaron, pero que pueden existir en lascondiciones
dadas. Por ejemplo, al observar los pliegues de Ilexión longitudinal
se puede hacer la suposición (partiendo del cuadro general de las
tensiones que originaron semejantes pliegues) de que estos últi
mos, por lo menos en algunos casos, van acompañados de fallas
de corrimiento. Y al observar el plíegue cupuliforme de flexión
transversal, haciendo uso de la misma metodología, podemos suponer que dicho pliegue puede estar cortado en segmentos aislados
por fallas normales I adlales y concéntricas. Semejantes deduccio
nes son interesantes desde el punto de vista práctico, ya que de
manera determinada orientan las observaciones ulteriores 'i permi
ten prever el carácter de yacimiento de unos u otros minerales tl
gados a la forma estructural dada.
Al restablecer los campostectónicos de tensiones, partiendo de
las deformaciones, se debe tener en cuenta que al hacerlo será casi
imposible valorar incluso la magnitud relativa de las tensiones
que actúan en unas u otras direcciones. La heterogeneidad y la
anisotropia de las rocas conducirá obligatoriamente al hecho de
que la relación de las dimensiones de las deformaciones en las di17'
259
versas direccionesse diferenciará de la relación de las magnitudes
de las tensiones en estas mismas direcciones.'
Se puede solamente probar a aclarar la orientación de los ejes
principales de tensiones, considerando
que ésta coincide con la
orientación de los ejes principales de deformación.
Sin embargo, la solución de este problema tropieza también,
por lo menos. con dos dificultades. Ante todo, lasuposición de
que los ejes principales de las deformaciones y de las tensiones
coinciden entre sí no es ni mucho menos irreprochable para los
cuerpos anisótropos
y heterogéneos
cuales son las rocas. No
obstante, se puede pensar que el error que de aquí se deduce no es
demasiado grande, ya que los ejes de la deformación también se
determinan con exactitud no muy elevada. La segunda dificultad
esmucho más seria: no se puede, ni mucho menos, estar siempre
seguro de que los ejes de la deformación que observamos permane
cen en su posición inicial y no sufrieron giro alguno durante el
proceso de las deformaciones ulteriores, sobrepuestas a la primera.
En lo sucesivo se verá que semejante superposición de las defor
maciones con el giro de los ejes iniciales principales de la defor
macióntienen lugar muy a menudo en la corteza terrestre, y no
siempre resulta posible aclarar el influjo de las deformaciones ul
teriores sobre las más tempranas. En lodos los casos esto requiere
un análisis especial.
De tal modo, la operación requerida se divide, por lo menos, en
dos: al principio se debe determinar la posición de los ejes de la
deformación que ahora se observa, y después sedebe establecer si.
como resultado de la superposición de las deformaciones ulteriores,
tuvo lugar el giro de estos ejes.
En conformidad con esto a continuación examinamos ante todo
ros métodos de determinación de los ejes de deformación,
y sola
mente después, ciertos procedimientos que permiten establecer la
existencia de giros posteriores de esos mismos ejes.
En la literatura se...
Regístrate para leer el documento completo.