Interés Superior Del Niño

* Interés Superior del Niño

Este caso, sin lugar a dudas marca un antes y un después, un punto de inflexión, no sólo desde el punto de vista judicial y social chileno, donde ayudó a cambiar paradigmas establecidos, sino que la construcción del Sistema Interamericano, constituido por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, (en adelante la Comisión) y la Corte Interamericana deDerechos Humanos (en adelante la Corte)

Ahora bien, la importancia de este caso radica en que por primera vez se analiza la discusión de tres elementos de igual importancia, i. Aspectos jurídicos, mediante el debate sobre la aplicación de un derecho (a priori, a la no discriminación de una madre por su declarada orientación sexual), ii. Una condición personalísima, como lo es poder ejercer su rolde madre y iii. Un principio, el interés superior de los tres menores en cuestión.

Desde este punto de vista, es menester, en un primer lugar, hacer hincapié en los argumentos rectores del progenitor ante los Tribunales chilenos, y a la vez la pasividad de los órganos judiciales ante estos fundamentos, basados en un binomio cargado de prejuicios, homosexualidad-perversión, que esgrime eldemandante, y así lo confirmaron los Tribunales Chilenos, le impide a demandada poder llevar una correcta y adecuada aplicación de sus labores maternales para con sus hijos, lo que resulta una falacia, y a la vez una situación incompatible con lo pregonado y alzado en los Derechos Humanos, ya que estos prejuicios conllevan una discriminación injustificada a quienes optan por una realización sexualdiferente a la establecida en los parámetros sociales y culturales a lo largo de la historia, lo que deriva en una amplia fuente de discriminación a toda situación que salga de aquellos parámetros impuestos. Desde ese punto de vista, el no reconocimiento de la diversidad por los órganos jurisdiccionales de nuestro país, la imposición de normas morales, y la supuesta protección al orden jurídico yético que persigue una decisión como la adoptada en el caso de la Juez Atala conlleva una trasgresión al principio de no discriminación, toda vez que las normas morales impuestas no expresan una adecuada protección a todos por igual e impiden un desarrollo humano de la Jueza Atala que no tiene el deber jurídico, ni moral de soportar por tener una condición sexual distinto al establecido socialmente.Respecto a la reivindicación del interés superior del niño, cabe reconocer que a lo largo de la historia de la Corte han sido múltiples los casos resueltos cuyo principal móvil ha sido velar por el respeto a este interés, lo que nos lleva a considerar que el fallo se mantiene en la tradicional senda de defender a un sector tan vulnerable de la sociedad como son los menores. Su vulnerabilidadradica en que es común en nuestra región que en razón de su edad, estén expuestos a sufrir discriminación, disminución o negación de sus derechos fundamentales[1]. Dicho interés va a ser diferente en consideración de las circunstancias que rodean al menor vulnerado, puesto que de los múltiples casos conocidos por la Corte que involucran a menores lesionados en sus derechos, las historias sondiferentes, y la razón para recurrir a la instancia internacional ha sido sustraerlos de diversas formas de agresión y desprotección. No podemos sustraer el caso del contexto en que cada menor se inserta, y por tanto, más que hablar del interés superior del menor en abstracto, pensamos que debemos considerar el interés superior de cada menor en concreto. El interés superior del menor es un conceptojurídico indeterminado, y que en la especie, va a ser necesario llenar por el criterio de los jueces, valorando el supuesto de hecho que rodea la controversia.

Debemos considerar también la importancia del menor como sujeto de derecho. Referirnos así a los que la tendencia actual[2] llama “NNA” (niños, niñas y adolescentes) no implica en ningún caso entenderlos como un sector menos capaz o...