La empresa familiar en latinoamérica

LA EMPRESA FAMILIAR EN LATINOAMÉRICA

MEMORIAS DE UN CONGRESO
POR JORGE MORFÍN HIERRO

Leí lo siguiente en un artículo escrito con cierta socarronería, por un ejecutivo gustoso de filosofar sobre estos temas:

En última instancia, dicen algunos, ¿qué importa los valores, las costumbres, las nacionalidades, la cultura, las personas? ¿qué es eso, cuánto vale? ¿de verdad tiene tantaimportancia? Logremos resultados, nada más resultados y más resultados y olvidemos lo demás: Compremos una nueva cultura de altísima productividad, importemos el mejor sistema de cambio hacia la más alta calidad que nos prometa ser más ricos y, por lo mismo, más dichosos... ¿cómo hacerlo? El esquema es fácil: por una lado se debe establecer rápidamente un sistema económico liberal o neoliberal, para elcaso es lo mismo, inmediatamente después se organizará un buen programa de reconversión, calidad y reingeniería -si son importados y aplicados por algún consultor con apellido sajón, mucho mejor- Después debemos empezar a competir unos contra los otros y, sobre todo, como David contra Goliat, en contra los mercados globales que nos piensan invadir y que, dígase lo que se diga, en nuestro caso, y hayque decirlo bajito, estamos recibiendo con muy buena cara...

Aun cuando esto sería el mejor sueño para algunos colegas ejecutivos, no va a resultar. Y, sin embargo:

1.- La competencia es un hecho; los mercados globales también y
2.- Es necesario que nuestros programas de cambio se basen en nuestra cultura para que duren y, precisamente, en la experiencia latinoamericana y susentendedores;
3.- Si de verdad queremos competir, debemos dejar la buena cara y, por lo menos, debemos tratar de lucir un poco más temibles de lo que somos
4.- Por último, no tengo la menor idea si el Capitalismo es mejor o peor que el Socialismo, ni me importa, porque ninguno de los dos funciona ya.

En este ensayo voy a tratar de los problemas humanos que la influencia externa causa, de sus relacionesy de sus capacidades para cambiar, desarrollarse y competir. No es el tema el de la tecnología pesada, los procesos industriales o las nuevas formulaciones en los mercados. Me referiré a la cultura de las costumbres y a su relación con la competencia. Estoy dispuesto a tomarme ese riesgo y hurtar este tiempo tan importante para ustedes para hablarles de lo que yo pienso de la cultura que nosrodea, de la gente que trabaja con nosotros y de lo que sí somos. NO TRATARÉ DE RECETAS DE ÚLTIMA MODA, NI DE "BEST SELLERS" DE LIBRERÍA. ¿Decepcionados? ESPERO QUE NO.

Las estaciones de la historia del mundo occidental han privilegiado valores diferentes en cada segmento; por ejemplo, el miedo al inframundo en la Edad Media se combinaba muy bien con la religión de la época. La aventura, laconquista, la riqueza con la magia del descubrimiento, fue privilegio de la Europa que inventó a la América. La fuerza de la razón y la fuerza de las armas caracterizó a la Grecia de Platón. Cada segmento trae consigo un cambio de valores; a veces, el cambio lo hace la conquista de unas culturas por otras, por las armas, por la economía o por la cultura misma y, a veces, la comunicación invade laintimidad de las mentes humanas y modifica su estructura fundamental; hoy nos han dominado los valores económicos de la competencia precisamente por la comunicación masiva de norte a sur. Allí adonde señala Montesinos desde el malecón de esta querida ciudad.

Es sólo un momento breve para el gran panorama histórico, que seguramente cambiará con el tiempo, pero es un cambio enorme para cada uno de losindividuos que estamos inmersos en él. Los tiempos que corren en este principio del siglo XXI en nuestros países, nos llevan hacia un trueque violentísimo de la cultura laboral, y por ende, de toda la composición social, ya que el trabajo es la actividad humana por excelencia. El reinado que comienza y que regirá nuestro próximo futuro tiene casi exclusivamente una base: la competencia. Al...