LA FAMILIA Y LA ETICA

LA FAMILIA Y LA ÉTICA

Todos tenemos familia, no se existe sin ella: conocida o no, unida o no, numerosa o no. Todos nos hemos gestado en un vientre materno deseados o no, cuidados o no,saludables o no. Tanto la ausencia como la presencia, la solicitud o el abandono, la compañía de los nuestros, en la tierra o en cielo, existe y tiene eficacia

Cada hombre es una soledad que aparece,crece, se configura y trasciende, en familia, célula primaria y natural de la sociedad. El amor, regalo esencial por su gratuidad, aporta la confianza radical, sobre todo, como participación de aquelAmor que es absoluta donación, causa eficiente y final, que se participa difusivamente en intermediarios, como la familia, por el amor adherimos, nos complacemos en lo valioso, y al hacerlo loconfirmamos en el existir, motivando eficazmente la alegría de ser, del estar fuera de la nada. El contexto ético es el de un segundo ser, una segunda naturaleza que se construye desde sí, desde lo dado. Laauténtica familia, escuela del amor, es puente entre lo humano y lo divino, siendo instrumento mediador básico para el desarrollo ético, es decir para motivar y orientar eficazmente la capacidad deencarnar los valores que perfeccionen al hombre como hombre. Arraigando lo trascendente de los valores que hay ya, puede ser base de virtudes esenciales para nuestro tiempo, como la veracidad, elaltruismo, la esperanza, la comprensión, el respeto, la fidelidad, la caridad, etc. La Ética gira en torno al obrar, que siendo digno o indigno, nos vuelve dignos o indignos.

Hoy en día se cuestionaquejosamente: ¿Y quién dice que esto está bien y esto está mal? ¿Por qué quieren obligarme a pensar que algo es bueno o es malo? Obviando el tema de los antecedentes históricos de líneas filosóficasimplícitas en el actual pensar, apelo al profundo sentir de nuestro ser humano, para responder a algo tan importante cual es el fundamento de lo ético. Tenemos, por los orígenes de nuestra cultura,...