La Importancia De Un Cese Al Fuego En Los Diálogos De Paz

LA IMPORTANCIA DE UN CESE AL FUEGO EN LOS DIÁLOGOS DE PAZ

Hablar de diálogo sin conocer lo que nos ha traído la guerra a quienes nacimos y crecimos en medio del conflicto colombiano, es anular premeditadamente las bases con las que se debe crear una nueva nación; algunos de nosotros jamás conocimos el país en paz; la muerte y los atropellos han sido temas cotidianos y vigentes.
Todostenemos las marcas de la violencia como tatuajes en la piel, que nos recuerdan que pertenecemos a una sociedad revestida de sangre, sin honor y sin gloria, donde las oportunidades nos han sido negadas por uno u otro bando.
Aunque parezca imposible, debido a más de medio siglo de conflicto, hay quienes nunca hemos perdido a un ser querido a manos de la guerra, pero eso no nos exime de ver el horror yla miseria que nos ha dejado la sed desmedida de violencia.
Según Diego Otero Prada, en su libro Las Cifras del Conflicto Colombiano1, esta absurda guerra nos ha dejado más de 700.000 muertos, 9.000 desaparecidos, 4.600.000 desplazados, 24.000 casos de terrorismo, 4.500 masacres, 1.000 atentados a poblaciones, 5.300 atentados a la infraestructura del país (torres de energía, puentes, oleoductos,peajes, acueductos, torres de comunicación, vías férreas y fluviales); ¿cuáles serán las cifras actuales?.
Sólo basta conocer estos datos para dimensionar lo que ha costado al país el conflicto, si se tiene que destinar un presupuesto mayor a la guerra que a la construcción de una nación mejor; esto sin contar el incalculable daño moral a la población: viudas, huérfanos, cercenados, enfermoscrónicos tanto física como psicológicamente, pero parece que aún no tenemos razones suficientes para verdaderas demostraciones de paz.
Cuando Colombia se dispone a reiniciar el diálogo con uno de los actores más influyentes en esta guerra; estamos divididos en el creer o no, sólo hay algo innegable, todos somos partícipes.
Es difícil imaginar esta nación en tranquilidad, pues han sido tantos losaños y los daños que pareciera imposible siquiera soñarlo, la violencia a veces se ve como característica del Colombiano y no es ajeno el presente diálogo de paz donde el cese al fuego no es condición, cabe entonces la duda de si será este otro intento fallido.

1. Otero Prada Diego, Las cifras del conflicto colombiano, 2007
Por la experiencia vivida en el Caguán, donde frenar la violencia noexistió como requisito, el alto al fuego debería ser la base de cualquier nuevo intento de diálogo; si tenemos en cuenta que sería la máxima demostración de credibilidad en el proceso mismo, ya que permite darle a la opinión pública muestras contundentes de la seriedad con que se está abordando el tema, un gesto tan significativo daría a la contraparte la confianza necesaria para poner sobre lamesa todas sus cartas.
Teniendo como bandera la confianza, estamos hablando de construir un proceso de paz sobre la base de la credibilidad, es una apuesta al positivismo, es la confirmación de la dignidad del diálogo que se aborda, el cual corresponde nada más y nada menos que a la esperanza de una vida diferente para 46 millones de colombianos. Lograr ganarse la confianza no solo de los actoresdel conflicto, sino de una comunidad tan agobiada, temerosa e incrédula es sin lugar a dudas en sí mismo un gran éxito.
Un diálogo en medio de agresiones tan aberrantes como son los bombardeos, y las minas anti-persona, se torna vulnerable, pues otorga la posibilidad de demostrar el poder de cada bando a través del recrudecimiento de la guerra.
En la práctica no hay paz, ¿Qué puede esperarsedel proceso?. Sin lugar a dudas hay que cesar el fuego para reducir el costo humano de la guerra, ya que la violencia vista desde cualquier punto siempre ha generado más violencia, es una bola de nieve que se ha llevado consigo la tranquilidad de campesinos y ciudadanos, la prosperidad del país, la posibilidad de que los niños crezcan en una región con mayores posibilidades; ha segmentado a la...