La larga lucha de un pensador olvidado

A más de medio siglo de la muerte de Raúl Scalabrini Ortiz

La larga lucha de un pensador olvidado

La decisión del Gobierno Nacional de declarar al 2009 como el “Año de Homenaje a Raúl Scalabrini Ortiz”, de quien el 30 de mayo último se cumplieron 50 años de su fallecimiento, es una buena oportunidad para recuperar, debatir y actualizar el legado de uno de los pensadores más brillantes, ytambién más ignorado, de la Argentina.
Scalabrini Ortiz, como Arturo Jauretche, Rodolfo Puiggrós, Raúl Dellepiane, Homero Manzi, Juan José Hernández Arregui, Abelardo Ramos y José María Rosa, forma parte del grupo de intelectuales que, a mediados del siglo pasado, avalaron el peronismo desde un nacionalismo democrático y fueron injustamente silenciados y condenados al olvido.
Nacido enCorrientes el 14 de febrero de 1898, aunque creció y vivió en la Capital Federal, Scalabrini enriqueció como pocos el pensamiento nacional y exhibió, a lo largo de su vida, un fuerte compromiso con su patria.
No fue un maestro en el sentido tradicional del término, pero sus aportes intelectuales son invalorables y contribuyeron, en una etapa crítica de un país sacudido por las secuelas de la crisisinternacional de 1929, el golpe militar contra Hipólito Irigoyen y las prácticas del “fraude patriótico”, a revelar los intereses económicos y descorrer los velos ideológicos que lo condenaban a la triste posición de vasallo de la corona británica.
En algún momento se conectó con los grupos nacionalistas que, bajo el liderazgo de Ernesto Palacio y los hermanos Julio y Rodolfo Irazusta, veníanrevisando la historia desde una perspectiva elitista y sectaria, pero la relación duró poco tiempo. Para Scalabrini Ortiz, el verdadero nacionalismo debía ser popular y democrático.
En El hombre que está solo y espera, publicado en 1931, buscó, desde una visión en parte metafísica, atrapar el alma del porteño. "El hombre de Corrientes y Esmeralda –indica- es el vértice en que el torbellino de laargentinidad se precipita en su más sojuzgador frenesí espiritual. Lo que se distancia de él, puede tener más inconfundible sabor externo, peculiaridades más extravagantes, ser más suntuoso en su costumbrismo, pero tiene menos espíritu de la tierra".
No simpatizó demasiado con el gobierno yrigoyenista, pero advirtió rápidamente el carácter reaccionario del golpe de Estado de 1930. Por eso, tresaños después, participó en el levantamiento cívico – militar del radicalismo en Paso de los Libres. A raíz del fracaso de la rebelión terminó detenido en la Isla Martín García y a principios de 1934 marchó al exilio en Europa.
Al regresar, casi un año después, cuando funda junto a otros escritores nacionalistas y de izquierda, la revista “Señales (económicas, financieras y sociales)”, ya habíaelaborados las ideas centrales en torno a las cuales girarían sus obras políticas más importantes: “Historia de los Ferrocarriles Argentinos” y “Política británica en el Río de la Plata”.
“Todo lo material, todo lo venal, transmisible o reproductivo es extranjero o está sometido a la hegemonía financiera extranjera. Extranjeros son los medios de transportes y de movilidad. Extranjeras lasorganizaciones de comercialización y de industrialización de los productos del país. Extranjeros los productores de energía, las usinas de luz y gas. Bajo el dominio extranjero están los medios internos de cambio, la distribución del crédito, el régimen bancario. Extranjero es una gran parte del capital hipotecario y extranjeros son en increíble proporción los accionistas de las sociedades anónimas”,aseguraba al describir la hegemonía del capital inglés.
Para Scalabrini, los ferrocarriles controlados por los británicos, a los que comparaba con una “inmensa tela de araña” que aprisiona a la república, eran la clave del sistema de dominación, ya que estaban organizados para entregar riqueza barata en el puerto de Buenos Aires a los barcos ingleses y, con sus tarifas arbitrarias, destruían...