Licenciado

Los heraldos que anuncian la incertidumbre
que nos aguarda con sus fúnebres ramos

Cada poema es un destello deslumbrante o imperturbable. Sin embargo los destellos se suman, se acercan entre sí, se encuentran; se convierten en elongaciones, en complementos; se imbrican o se repelen. Quizá la intención de los autores no sea esa. Quizá estén tan distantes como cerca sus palabras, pero alpermitirnos su encuentro hacen mella en nosotros para permitirnos un nuevo sentido, un nuevo trepidar telúrico.

A pesar de presumir la cantidad de análisis sobre Los heraldos negros, aquí, se presentará un intento hermenéutico propio. Confieso (acaso necesariamente) que no he leído algún análisis de este poema, a pesar de haber encontrado uno en el internet, que a primera vista se nota exhaustivo,titulado “La predestinación del acto poético "Los heraldos negros" de César Vallejo” escrito por José Reyes González Flores. Lo encontré cuando buscaba el significado del epígrafe, y será esto lo único de lo que me serviré para este ensayo.

De Lo fatal tampoco he querido acudir a lo dicho por otros. Se pretenderá, aquí, ensayar el encuentro de puntos de contacto en dos visiones, dospercepciones vitales, de dos poetas que comparten el ámbito latinoamericano, pero que pertenecen a periodos artísticos diferentes; un par de años habían transcurrido de la muerte de Darío, cuando se preparaba la edición de Los heraldos negros. A Darío se le considera padre del modernismo, a Vallejo, poeta de vanguardia, pero aquí más que su encasillamiento se pretende ensayar puntos de contacto entre lospoemas.

La anunciación oscura

Los títulos son la puerta a la experiencia estética. Entonces surge, sino tenemos la certeza, la pregunta por lo que son los heraldos y así establecer un referente etimológico para la construcción del sentido del poema. Los heraldos son anunciadores, aquellos seres que pronostican lo que sucederá y se les asocia comúnmente con la imagen de ángeles que hacen sonaruna larga trompeta antes de hacer su anuncio. Al atribuírsele el color negro, que asociamos con la oscuridad, con lo lúgubre, es posible pensar en la anunciación de la muerte o de algo inevitablemente siniestro, grave, doloroso.

Antes de las suyas, Vallejo nos pone frente a las palabras Quit potést cápere capiat, que, atendiendo a González Flores, pueden significar “quien pueda recibir esto,que lo reciba o quien pueda entender que entienda” (2004:1) ¿Por qué recurre a estas palabras? Puede pensarse que el poeta considera la recepción de sus palabras un privilegio de algunos o de aquellos que así se lo permitan, y recurrir a las palabras de otro, sea en este caso, una estratagema de falsa modestia, porque a pesar de que no quiera Vallejo encauzarse con su poema entre aquellos queprodigan la verdad cuando afirma no saber, alguna certeza nos será admisible terminada la lectura de Los heraldos negros.

El lector debe estar dispuesto a permitir que la literatura le sacuda del “lugar” en que se encuentra, si no, las palabras pasan por encima, no le tocan, no le conmueven. Milan Kundera, en uno de sus ensayos sobre la novela, señala que ésta dice al lector que las cosas no van tanbien como cree. Acaso encaje tal aseveración para nuestros poemas y encontremos en ellos una mirada nada optimista de la vida.

Entonces tenemos los versos.

Hay golpes en la vida, tan fuertes... ¡Yo no sé!

Una contradicción. La certeza y el no saber se conjugan en un verso para zafar al poema del compromiso en la construcción de verdades. Porque ante los ojos de quien no pueda recibirestas palabras quizá no existan tales golpes, para quien crea que la vida es cruel, alegre y dolorosa, mezcla de paraíso e infierno, sí. El verso está conformado por dos aseveraciones, la primera nos pone ante la sensación de certeza de una existencia azarosa determinada por el carácter repentino e inesperado de los golpes y la segunda causa la duda, que ha sido preludiada por la suspensión de los...