Lime

{xxxxx}
Divago una vez mas por el pasillo, no sentía alegría de volver, pero algo era algo.
La puerta seguía al final del pasillo, como era de esperarse, ¿por qué habría de haberse movido? No era como si se hubiera ausentado por mucho, después de todo solo fueron 2 semanas, o algo así.

Asomo la cabeza por la puerta y curiosamente encontró lo que menos quería.
Dejo las valijas a un lado dela puerta, y en silencio entro a la habitación.
Volvió a mirar en dirección a la cama se pregunto que se había referido Seguchi con Amante
Claro, sabia lo que le gustaba y lo que no; sabia como irritarlo, le gustaba jugar con eso; También que le parecía inmensamente interesante un chico que tuviera sentido del romance y le aborrecía que una chica lo tuviera porque la convertía en una mas delmontón; eso no lo hacia su amante, solo un conocido, casi un amigo.
Estando a dos pasos de la cama respiro profundamente, percibiendo así su característico perfume a rosas, entremezclado con un poco de licor. ¿Habría pasado la noche bebiendo? De seguro que si, además era algo que le gustaba, tenia un exquisito gusto por el licor, y por lo menos una vez al mes dedicaba una noche a pasársela bebiendo,solo por diversión, nunca entendió que le ve de divertido a pudrirse el hígado.
Al abrir los ojos, ya estaba en el borde de la cama, y se había inclinado para verlo.
Tenia los labios levemente rojos. Tal vez habría estado bebiendo vino, supuso.
Le retiro un par de mechones que le estorbaban del rostro y se acerco un poco mas, casi se topaban sus labios.
Pero hacerlo era inevitable.
Tenia quedecir algo, estaba dormido y no lo escucharía, era el momento perfecto, mas no se le ocurría nada; ¿Que seria lo mas apropiado de decir, o que seria coherente decir?
¿Por qué tenia que ser coherente?
Nunca fue bueno para excusas rápidas, era una persona demasiado elaborada.

Un pequeño e inconsciente movimiento departe de quien aun dormitaba y sus labios se tocaron.
Apenas, pero se estabanrozando.
Arshes se mantuvo inmóvil y un tanto nervioso, era la primera vez que sentía nervios; Le resultaba fascinante, que su cuerpo temblara un poco, y su corazón latiera rápidamente como si fuese a explotar. Su nueva sensación incremento aun más cuando Argentine entreabrió levemente los ojos.
Ojos grises, un tanto nublados le veían, como si fuera una clase de ilusión o algo parecido.
Sus labiosse separaron, siguieron en silencio e inmóviles.
Un pequeño suspiro departe de Argentine hizo que Arshes le prestara mas atención, parecía molesto.
“Demonios… ¿cuánto habré bebido para volver a soñar con él?”
“¿Soñar?”
“Que frustrante” una mano se apoyo en el rostro de Arshes, parecía no percibirlo “…no poder verlo…tocarlo” suspiro un tanto triste “nisiqiuera discutir estúpidamente comoantes”
“…”
“que patético” dijo con una risita curva “…que patético que soy…” murmuro cerrando sus ojos nuevamente “puedo tener a la chica que quiera, y aquí estoy…lamentándome por un tarado a quien ni si quiera sé si le importo”
Con la otra mano tomo su rostro y se acerco lo suficiente para besarlo a gusto
“Por algo son sueños, no se cumplen”
Y termino por tumbar a Arshes a la cama, besandodelicadamente sus labios. Si aun creía que era un sueño, estaba tan ebrio como para distinguir un sueño de la realidad. Pero así era feliz.
El otro se dejaba, sin hacer reproche alguno; no se sentía culpable, ni un mero remordimiento se cruzaba por la cabeza, ¿eso era malo?
Sintió los labios posarse sobre su cuello, y dejar que el cálido aliento se desembocara allí, mientras las manos de Argentine seaferraban a su camisa y su cálida piel entraba en contacto con la fría suya.
Agradable sensación, ¿cómo se llamaba?
Hacia que sus manos se enredaran en el rubio cabello, que su piel reaccionara por cada beso, le arrancaba una que otra sonrisa conforme las manos se paseaban por cuello y hacia que la sangre le hirviera. ¡Tenia que saber como se llamaba eso!
Argentine de seguro sabría, pero...