Malinche

Páginas: 23 (5681 palabras) Publicado: 18 de marzo de 2012
IV HIJOS DE LA MALINCHE La extrañeza que provoca nuestro hermetismo ha creado la leyenda del mexicano, ser insondable.Nuestro recelo provoca el ajeno. Si nuestra cortesía atrae, nuestra reserva hiela. Y las inesperadasviolencias que nos desgarran, el esplendor convulso o solemne de nuestras fiestas, el culto a lamuerte, el desenfreno de nuestras alegrías y de nuestros duelos, acaban pordesconcertar alextranjero. La sensación que causamos no es diversa a la que producen los orientales. Tambiénellos, chinos, indostanos o árabes, son herméticos e indescifrables. Tambén ellos arrastran enandrajos un pasado todavía vivo. Hay un misterio mexicano como hay un misterio amarillo y unonegro. El contenido concreto de esas representaciones depende de cada espectador. Pero todoscoinciden en hacersede nosotros una imagen ambigua, cuando no contradictoria: no somos gentesegura y nuestras respuestas como nuestros silencios son imprevisibles, inesperados. Traición ylealtad, crimen y amor, se agazapan en el fondo de nuestra mirada. Atraemos y repelemos.No es difícil comprender los orígenes de esta acticud. Para un europeo, México es un país al margende la Historia Universal. Y todo lo que seencuentra alejado del centro de la sociedad aparece comoextraño e impenetrable. Los campesinos, remotos, ligeramente arcaicos en el vestir y el hablar,parcos, amantes de expresarse en formas y fórmulas tradicionales, ejercen siempre una fascinaciónsobre el hombre urbano. En codas partes representan el elemento más antiguo y secreto de lasociedad. Para todos, excepto para ellos mismos, encarnan looculto, lo escondido y que no seentrega sino dificílmente: tesoro enterrado, espiga que madura en las entrañas terrestres, vieja sabiduría escondida entre los pliegues de la tierra. La mujer, otro de los seres que viven aparte, también es figura enigmática. Mejor dicho, es el Enigma. A seinejanza del hombre de raza o nacionalidad extraña, incita y repele. Es la imagen de la fecundidad, pero asimismode la muerte. En casi todas las culturas las diosas de la creación son también deidades de destrucción. Cifra viviente de la extrañeza del universo y de su radical heterogeneidad, la mujer ¿esconde la muerte o la vida?, ¿en qué piensa?; ¿piensa acaso?; ¿siente de veras?; ¿es igual a nosotros? El sadismo se inicia como venganza ante el hermetismo femenino o como tentativa desesperada para obteneruna respuesta de un cuerpo que tememos insensible. Porque, como dice Luis Cernuda, “el deseo es una pregunta cuya respuesta no existe”. A pesar de sudesnudez —redonda, plena—en las formas de la mujer siempre hay algo que desvelar:Eva y Cipris concentran el misterio del corazón del mundo.PDF created with pdfFactory trial version www.pdffactory.com2Para Rubén Darío, como para todos los grandespoetas, la mujer no es solamente un instrumento deconocimiento, sino e1 conocimiento mismo. El conocimiento que no poseeremos nunca, la suma denuestra definitiva ignorancia: el mistcrio supremo.Es notable que nuestros representaciones de la clase obrera no estén teñidas de sentimientosparecidos, a pesar de que también vive alejada del centro de la sociedad —incluso físicamente,recluída en barrios yciudades especiales—. Cuando un novelista contemporáneo introduce unpersonaje que simboliza la salud o la destrucción, la fertilidad o la muerte, no escoge, como podríaesperarse, a un obrero —que encierra en su figura la muerte de la vieja sociedad y el nacimiento deotra—. D. H. Lawrence, que es uno de los críticos más violentos y profundos del mundo moderno,describe en casi todas sus obras lasvirtudes que hacen del hombre fragmentario de nuestros días unhombre de verdad, dueño de una visión total del mundo. Para encarnar esas virtudes crea personajesde razas antiguas y no-europeas. O inventa la figura de Mellors, un guardabosque, un hijo de lasierra. Es posible que la infancia de Lawrence, transcurrida entre las minas de carbón inglesas,explique esta deliberada ausencia. Es sabido que...
Leer documento completo

Regístrate para leer el documento completo.

Estos documentos también te pueden resultar útiles

  • La malinche
  • La malinche
  • Malinche
  • La Malinche
  • malinche
  • La Malinche
  • MALINCHE
  • Malinche

Conviértase en miembro formal de Buenas Tareas

INSCRÍBETE - ES GRATIS