MARIANA

MARIANA…

Ella una gota de ternura que reposa sobre una cúpula de arquitectura gótica que se
desliza sin pausas con ansias de tocar el suelo que la hará germinar en una hermosa
pero extinta rosa,que deja al descubierto sus pétalos para proteger aquella semilla débil
que pide tan sólo un poco de amor para teñir de color su cuerpo, primero prefiere
navegar por un mar de letras que se vuelventempestad al momento de cambiar la
página, renacen los miedos, pero con ellos las ansias de enfrentarlos para luego abrir
un portal, lleno de preguntas o reflexiones de un futuro que se desconoce.Sus ojos unos grandes vitrales de color marrón que dejan entrar tiras de luz para
hacer correr un motor construido por miles de engranes llamados recuerdos filtrando
todo lo olvidado y regalandouna gran sonrisa a esos labios rosa que dicen mucho pero
aplican poco. Su voz una melodía con un trueno de razones, que no se dejan llevar por
la locura que le podemos ofrecer muchos.

Perfumeempacado en un recipiente que engaña por su tamaño, pero maravilla
con su fragancia, creando un éxtasis que invaden la mente, dejando prisionero con ese
aroma de mujer, que se convierte en una ratonade capa negra con unos grandes
espejuelos que esconden la mirada picara que se narra a sí misma, magnifica especie
que nace y renace del dolor para dar tranquilidad a los que la escuchan, construyeuna propia imagen que refleja una sombra de su rostro pálido como el invierno,
adornado por un cabello negro corto estilizando su belleza pero que no deja guiar el
camino hacia ella.

Se guardaen telas negras que esconde su figura, opacan su sonreír y aseguran su
sentir para no mostrarlo vulnerable. Pensamiento de novela ilustrada en una imagen
critica de lo que se cree saber,suposiciones no existentes sólo con la palabra se vive y la
soledad de su alma camufladas en pilares de bibliotecas esperando encontrar la
tranquilidad del no estar.
Deja que entre más que una coma, un...