Mis Escuelas

MIS ESCUELAS.RECUERDOS PASADOS Y REALIDADES RECIENTES
Tras 37 años y 11 meses de ejercicio de labor docente en el cuerpo de profesores de Educación Secundaria, ( 20 de ellos en el de catedráticos de Educación Secundaria) y a las puertas de mi jubilación, quiero aportar alguna reflexión sobre “la escuela” como institución social, uno de los pilares básicos de la sociedad del bienestar, quenecesita de todo el apoyo posible en estos momentos porque un pueblo que no valora su sistema educativo está llamado a desaparecer.
Todos los sistemas docentes son el reflejo de los valores y las necesidades socioeconómicas del momento histórico que las crea y por tanto responden a las leyes y al modelo de ciudadano que la sociedad necesita formar , y cuando se llega a una edad es bueno refrescar lamemoria histórica y tomar consciencia de ello
La escuela de la gente de mi generación, en los años 50 del siglo pasado, en pleno desarrollo del franquismo era producto de la escuela basada en la ley del año 39 ( Ley de Instrucción Primaria y en el 53 ( Ley de Ordenación de la Enseñanza Media). Mis recuerdos de esa escuela, me llevan a la Escuela de Párvulos del Terrero, dónde en el jardín,que entonces era inmenso (como se ve todo de pequeño), jugaban los chicos a la guerra subiéndose al depósito del agua como montaña de ataque-defensa y las chicas cantábamos alrededor del árbol que había justo delante del pararrayos o nos asomábamos a la tapia desde la que se divisa la Val, buscando al “sacamantecas” o al “hombre del saco” (más tarde me enteré que se identificaba con la gente delmaquis para crear miedo en los niños, pero fue mucho más tarde….). Recuerdo a la señorita Mª Luisa Lacalle, una señorita cojita y soltera que daba “repaso” en su casa a los niños para ganarse algo de dinero, teníamos que subir las escaleras de madera de la casa hasta el último piso, nos sentábamos en una sillitas de enea y nos enseñaba el catecismo.
A los seis años se empezaba la EscuelaPrimaria y con ella llegaba la preparación de la Primera Comunión y el “uso de razón”. La rivalidad por el orden de pasar a recibir la comunión era una cuestión importante en las familiares, pues se ponía de manifiesto en público lo listo que era el chico o la chica y no solo para orgullo de la familia sino también para envidia de las demás. Ahí tuve yo uno de mis primeros disgustos, pues además desoportar los “pipirroyos” de Mosén Paulino, me vi degradada al pelotón de los tontos por no saberme el “Yo pecador”. Hasta los 12 años duraba este periodo escolar graduado en el que íbamos a usar dos grandes libros: Las Enciclopedias Álvarez
Era una escuela de carácter confesional, patriótico, social, intelectual, físico y profesional, obligatoria , gratuita y con separación de sexos. A las chicasse nos formaba para ser “mujeres de nuestra casa”, por lo que además del aprendizaje de las matemáticas , la gramática, de la historia de España y el sábado a la historia sagrada, las tardes estaban destinadas a la costura de labores. Para mí eran tardes interminables de vainicas que me hacía repetir una y otra vez Dª Delia en un pañito renegrido, cuando mi atención estaba centrada en la lecturade los libros de aventuras de Tom Sawyer o de Celia, que en voz alta leían las mayores de la clase.

Nunca me gustó el sabor de la leche en polvo que nos mandaron los gentiles americanos a los desnutridos niños españoles de los años 50 cuando se instalaron en las bases, pero sí que me encantaba el bocadillo de sardinas y el chocolate con mantequilla que nos daban tras hacer cola en la plaza delgranero hasta que nos llegaba el momento de recogerlos .
El nacional-catolicismo nos obligaba a ir cada viernes de Dolores a rezar el Vía Crucis a la ermita, a mi me gustaba ir de excursión cantando “vamos a contar mentiras” o “Montañas Nevadas”, además cada 20 de noviembre íbamos a la puerta de la iglesia a cantar el “Cara al sol” o las primeras estrofas del mismo, supongo que no sabíamos muy...