Nacionalismo andaluz

¿UN NACIONALISMO ANDALUZ?

Raíces y alas. Pero que las alas arraiguen
y las raíces vuelen. - Juan Ramón

Lo que Juan Ramón exige de nosotros toma un sentido especialmente importante para los países que, como España, albergan varias culturas. En efecto, parece ser la solución ideal que cada grupo cultural no sólo sea capaz de desplegar sus alas libremente sino también se arraiguesuficientemente dentro de un Estado tolerante e inclusivo. El caso actual de Cataluña, sin embargo, enseña que la situación nunca es tan simple cuando el nacionalismo interviene: por una parte hay nacionalistas que parecen dispuestos a irse volando, y por otra algunos partidarios de la centralización niegan incluso la posibilidad de que diferentes naciones puedan existir en un mismo Estado.

Mientrasque la cuestión del Estatuto Catalán acapara la escena política, es interesante mirar la evolución de la identidad andaluza y del llamado andalucismo. Éste ha sido debatido en el pasado, pero no parece de actualidad hoy día. ¿Por qué? ¿Sería mejor que existiera un nacionalismo andaluz para que la Comunidad de Andalucía despegara y se desarrollase más? Éstas son las preguntas planteadas aquí.Intentaremos encontrar respuestas no sólo a través de las visiones de algunos autores sino también teniendo en cuenta las opiniones de los andaluces hoy. Sin embargo debe quedar claro que la encuesta dirigida a este fin no fue realizada para conseguir datos precisos sino simplemente para tomar el pulso de distintos grupos y tentar algunas hipótesis, evitando encerrarnos en torres de marfil y debatir deconceptos que no son relevantes.

Antes de empezar hay que contestar a las objeciones sosteniendo que es mejor no hablar de identidad o nacionalismo. Después de todo, si la política andaluza no tiene una dimensión identitaria fuerte, ¿porqué arriesgar que la política se haga divisiva? La respuesta, tanto si queremos como si no, es que el paisaje político cambia - con la presencia creciente deinmigrantes en Andalucía y los acontecimientos en otras provincias – con lo que el riesgo está presente. En otras palabras, la gente piensa en un momento u otro en su identidad y tiene opiniones sobre los movimientos nacionalistas. Nuestra tarea, pues, es entender las percepciones actuales y asegurar que la gente no sea manipulada sino que haga elecciones informados y libres acerca de su identidad.Por eso este ensayo plantea una noción no normativa del nacionalismo, es decir, un entendimiento que evita juzgar a priori. Eso no excluye que la identidad andaluza como tal sea inherentemente normativa y subjetiva; de hecho, debe seguir variando a medida que la gente disputa su contenido. Pero este debate no debe transformarse en un juicio de la legitimidad de toda opción nacionalista,porque eso reduce tanto la libertad cultural individual como nuestra capacidad colectiva de manejar el nacionalismo de manera satisfactoria para todos.

I. Fuentes de la identidad andaluza
Existen muchas concepciones diferentes de lo que es la identidad de un grupo, de hecho son tantas que es difícil ponerse de acuerdo sobre lo que discutimos. En este sentido un autor identifica cuatrocontraposiciones "al nivel de los valores y las percepciones" entre trabajadores y desempleados, ricos y pobres, gobernantes y gobernados, y "los que saben, frente a los ignorantes" (¿?). Podríamos multiplicar las categorías y decir, por ejemplo, que los jóvenes están más orgullosos de sus equipos de fútbol mientras que los ancianos se identifican con la religiosidad importante en la región.

Perocentrarnos en estas diferencias - la cuales además no son propias de Andalucía - no aclara las cosas sino que siembra más confusión. Es mucho más útil destacar "ejes en torno a los cuales puede articularse una idea... de Andalucía", como hace el mismo autor, que sigue identificando elementos específicos del patrimonio político (instituciones, lobby, etc.), de las posibilidades económicas, y de la...