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Don Pedro de Valdivia se puso en contacto con el cacique Vitacura, principal representante de los incas en estas tierras, manifestándole la intención de levantar una ciudad en la isla del cerro Huelen. El consentimiento de Vitacura provocó la indignación del cacique Michimalonco que gobernaba el valle del Aconcagua, se levantó en armas y avanzó hasta el Mapocho con el fin de agredir aVitacura a quien acusaron de traición.
Los españoles, conocedores de todos estos acontecimientos, citaron a la totalidad de los caciques de la región para manifestarles lo beneficioso que les resultaría para ellos el admitirlos en su territorio, y procedieron a regalarles objetos en señal de amistad, tal como ya lo habían hecho en las demás colonias americanas. Los indios chilenos aceptaron losobsequios, pero no les agradó mucho el tener nuevos vecinos.
Pocos días después se presentó el ejército de Michimalonco exigiendo la retirada de los invasores o que sufrieran las consecuencias, lo cual fue rechazado por Valdivia. Así fue como después de orar los conquistadores y encomendar sus armas al Apóstol Santiago, patrono de España, comprometiéndose, si la victoria les era favorable, la ciudad queallí se levantara, llevaría su nombre.
Los Conquistadores se dispusieron a la lucha, la cual fue incierta hasta la intervención de la caballería hispana, que causó estragos entre los indios. Una vez terminada la contienda y hecho prisioneros los caciques principales, los conas fueron interrogados en forma individual, y todos los detenidos dijeron de una u otra manera, que cuando elenfrentamiento era más encarnizado, vieron venir desde las nubes un jinete vestido de blanco que se abalanzó sobre ellos sembrando el terror de tal manera que los indios sólo atinaron a emprender una despavorida fuga que terminó en su derrota




 
Un ataque indígena liderado por el cacique Michimalongo destruyó la recién fundada ciudad de Santiago. Sin embargo, los conquistadores lograron salvarse,gracias a la intervención de Inés de Suárez, la primera española que pisó territorio nacional.

La ejecución de Solier y de sus compañeros produjo el efecto de aquietar a aquéllos que entre los españoles no podían vivir sin tramar conspiraciones y revueltas, debía estimular el levantamiento de los indígenas. Vieron éstos que los conquistadores sobre ser muy pocos, estaban profundamente divididosentre sí, y que no podían sostenerse sino matándose los unos a los otros.

Con la muerte de trece españoles en Cancón, con los dos muertos anteriormente y las cinco ejecuciones de la conspiración, los conquistadores se redujeron a 130. Era un puñado de hombres abandonados a su suerte, en medio de una población indígena hostil. 

La exigüidad de su número estimulaba a destruidos. Los síntomas dela rebelión se acentuaron rápidamente y pronto se dio cuenta Valdivia de que iba a ser atacado por la totalidad de los indios de Aconcagua, Santiago y Cachapoal. Había resguardado la agrupación de ranchos que pomposamente bautizara con el nombre de Santiago del Nuevo Extremo con parapetos de palos; y en previsión de un sitio, después de la cosecha del maíz, reunió provisiones suficientes para dosaños. 

Valdivia creyó preferible dispersar las concentraciones de indios antes que se reunieran en una sola masa; y se dirigió en primer lugar contra los del valle de Cachapoal que eran los más numerosos. Partió en esta dirección, y. reuniendo a los soldados que llevó con los que tema allí Pero Gomez, juntó de noventa a cien hombres entre los cuales se contaban, tal vez, algunos negros horros yesclavos armados con la intención de disolver las concentraciones que empezaban a formarse en ese valle. En Santiago, quedaron treinta y dos jinetes y dieciocho arcabuceros y entre trescientos y trescientos cincuenta yanaconas, a las órdenes del teniente de gobernador Alonso de Monroy 

Los indígenas estaban al corriente de todos los movimientos de los españoles, pues cada indio amigo era un...