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Por esta acción, al menos ocho activistas fueron detenidos. La protesta se realizó en el marco de la visita a Israel del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y sólo una semana después de lapublicación de un abrumador informe (1) del departamento de Interior estadounidense sobre los accidentes de la petrolera Shell en las frágiles aguas del Ártico de Alaska el pasado verano.

Con estaacción, un grupo internacional de activistas de Greenpeace pretende llamar la atención sobre la responsabilidad que tiene el gobierno norteamericano con el Ártico para que sea salvaguardado del poder delas petroleras.

“El Presidente Obama tiene toda la evidencia que necesita para justificar una prohibición en las prospecciones petroleras. Obama debe dar un paso para proteger el Ártico de lascompañías petroleras que saben que no pueden operar con seguridad en las frágiles aguas del norte. Millones de personas alrededor del mundo se han unido a la campaña para proteger el Ártico y nopararemos hasta que todas las empresas se vayan”, afirmó Hila Krupsky, responsable en Israel de la campaña de Clima y Energía de Greenpeace.

Empresas petroleras como Shell buscan nuevas oportunidades paraexplorar los recursos que se pueden encontrar bajo las aguas de un Ártico cada vez con menos hielo, pero donde la probabilidad de accidentes es elevada.

El Ártico es uno de los ambientes másextremos y hostiles para buscar petróleo del planeta y sería imposible limpiar una marea negra.

“Lo que sucede en el Ártico afecta a cada ciudadano del planeta. Greenpeace demanda que no se permita aestas irresponsables empresas perforar en busca de más petróleo. La desaparición del hielo Ártico es una llamada urgente para pasar a la acción y luchar contra el cambio climático y no debe ser unaoportunidad para que las empresas petroleras busquen mayores beneficios”, añadió Krupsky.

Actualmente, Greenpeace mantiene una campaña para que las personas exijan al Presidente Obama la prohibición...