Noniná cuento

Un viaje de ida y vuelta

Hubo una vez un niño. Hace algún tiempo de esto, por aquél entonces, había que rezarle a los ordenadores de pantalla verde para que cargasen el juego y poder jugar. Era un tiempo en el que sólo había dos opciones en televisión, si no nos satisfacían…sabíamos lo que hacer como alternativa….

Este niño de estos tiempos que os hablo, podríamos decir que noera alto…ni bajo. No era guapo…ni feo. No era listo…ni tonto. No era gordo…ni flaco. Bueno…Normal. También en el colegio, desde primero hasta terminar el instituto fue progresivamente empeorando las notas, normal. Tenía también una familia bastante…normal. Con un padre muy normalmente trabajador y por lo tanto ausente. Una madre normalmente madre, por lo tanto muy muy presente. Unos hermanos yhermanas normales..
Bueno que rollo no… pues si, pero este niño tenía algo que le hacía especial, muy especial. Cada vez que estaba a punto de meter la pata, cuando iba a meterse en un lío por no hacer lo que debía, cuando pensaba que no sería capaz de hacer algo, y por lo tanto ni lo intentaba, o lo intentaría con tal desgana, que claro, le saldría mal o bien cuando alguien le decía que él nosería capaz de realizar alguna tarea… él, escuchaba una voz en su interior, una voz, siempre templada, cálida, cercana, suya sin ser su voz.

Esta voz, este susurro, le decía unas palabras, más bien unas silabas, siempre las mismas. Con este brevísimo monólogo se conseguía encender en su interior el valor, la fuerza y la motivación necesarias para afrontar el reto que fuera para salir, oincluso no llegar a meterse en ningún lío.

Cómo su vida era tan normal, el no observaba en esta voz ninguna cualidad especial, nunca se detuvo a cuestionárselo. Quizás pensaba que era algo que a todo el mundo le sucedía. Así pues, este niño fue creciendo, dejando de prestar atención a esta voz. Otros ruidos le distraían, música demasiado alta, muchos amigos parloteando sin parar, novias queocupaban todo su pensamiento ensimismándole. Discusiones con los padres y su propia cabeza que quiso dejar de escuchar…

Bastante tiempo después, como consecuencia entre otras cosas de haber dejado de prestar tención a esta voz, las cosas se embarraron. Tanto que todo a su alrededor era un inmenso charco de barro, donde no había nada a lo que agarrarse para salir a flote. Sólo tocando el fondo delcharco, y con el barro al cuello, pudo tomar impulso y desplazarse hacia arriba unos centímetros. Fue una decisión correcta. La primera en mucho tiempo. Cambiaría el curso de su vida. Le llevaría lejos, total, las cosas y personas valiosas que había a su alrededor habían perdido su valor, pues él había dejado de valorarlas. Así que se fue lejos y solo.

Esa voz que le deba valor y coraje con sólo6 letras, no volvió por haberse ido lejos. Pero si se dio cuenta de que en su nueva vida iban entrando, a medida que los necesitaba, personas digamos… especiales.
Se dio cuenta de que había uno de esos seres especiales, que fue su hermano. Hasta se parecía a su hermano de verdad. Y cuidó de él, concretamente de su exterior.
Se dio cuenta de que en su vida, también hubo una personaque hizo de madre, le cuidó como al niño que un día fue, le protegía en ese lugar donde él no sabía ver los peligros.
Hubo también dos, que siempre iban juntos y para el eran unos abuelos postizos geniales, daban calor de hogar.
Un amigo del alma. De los buenos. De los que aconsejan y dejan libre. De los que dan ejemplo. También cuido que no le faltara el ánimo y la alegría. Hubo máspersonas especiales que entraban y salían de su vida, así como los acontecimientos lo iban necesitando, era genial, cómo si todo esa gente estuviera en el banquillo esperando a entrar en el juego de su vida.
Algo en su interior estaba cambiando, él no tenía ni idea de qué era, pero sentía un calorcito muy dulce en la barriga. Había más silencio. Sí, menos amigos, pero todos esos seres...