Recuerdo cuando le dije a mi padre que me ofrecería como voluntario para ir a Creta. No deseaba que más jóvenes atenienses murieran al ser ofrecidos al Minotauro como sacrificio. Antes deembarcar acorde con mi padre que si vencía al Minotauro, a mi regreso izaría velas color blancas. Así mi padre sabría la suerte que había corrido. Al llegar a Creta me sentía como un héroe. Todosquerían saber quién era aquel valiente que venía a matar al Minotauro. Estábamos alojados en una prisión en espera del día que uno de nosotros fuera arrojado al Minotauro. Durante esos días Ariadna, hijadel rey Minos burló a los carceleros y logra acercárseme. Fue amor a primera vista, por lo que decide ayudarme a vencer al Minotauro y salir del laberinto. Me otorgo una espada de bronce mágica yun ovillo de hilo dorado que me serviría de guía para salir del laberinto donde se encontraba el Minotauro. Si vencía al monstruo, le prometí llevarla conmigo porque su vida corría peligro si su padrese enteraba que me había ayudado. A la mañana siguiente, pedí ser el primero en ingresar al laberinto; lugar donde muchas víctimas caminaron para encontrarse con ese monstruo que acabó con susvidas. Pero yo no seré otra de sus víctimas. Me le enfrentaré y lo destruiré. Ya dentro del laberinto todo se volvió oscuro. Até el ovillo al extremo de una piedra y comencé a adentrarme lentamente porpasillos y galerías del laberinto mientras se desenrollaba el hilo. Solo el ovillo me recordaba a mi amada esperando por mi regreso mientras yo me adentraba cada vez más por túneles y recovecos que mealejaban al mismo tiempo de ella. Todo se tornaba cada vez más oscuro. Era tanto el silencio, que solo oía el eco de mis pasos. De pronto ese silencio fue interrumpido por un ruido lejano parecido almugido de un toro. El ruido era cada vez mayor. Por un momento sentí deseo de escapar pero no me acobarde. Camine decidido y penetré a una gran sala. Allí encontré al terrible Minotauro. Su...
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