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lguna vez has sentido un momento repentino de completa claridad donde sabías que toda tu vida iba a cambiar? Hace algunos años yo lo tuve y desdeentonces las cosas nunca volvieron a ser las mismas. Me he curado de muchas maneras, he establecido relaciones humanas sorprendentes y ahora meencuentro trabajando en lo que amo con las personas que más amo. ¿Cómo fue que todo eso sucedió?

Todo comenzó cuando asistí a la primera clase enSeattle de Ike Pono impartida por mi esposo Bruce. Me enteré de que a esa clase iba a asistir una señora que yo ya conocía hace mucho, ansiaba verlaporque la recordaba como un persona con un gran espíritu, una gran fortaleza y llena de vida. Sin embargo se estremeció mi corazón al verla puesera apenas una sombra de la mujer que recordaba. Su apariencia era pálida, como si alguien le hubiera apagado su luz. Esa primera noche, no podíadormir imaginándome lo que le había pasado.

Mi asombro fue enorme al presenciar el poder de Ike Pono, ¡tan sólo en unos días la señora habíarecuperado la luz! Sus mejillas se enrojecieron y su chispa vibrante regresó. ¡Se podía escuchar su voz y sentir su espíritu volver a la vida!

Fueconmovedor ser testigo de lo que es realmente posible con Ike Pono en tan poco tiempo. Cuando volví por la Parte II y III en los siguientes meses ynoté la transformación en mis compañeros y como se reflejaba en nuestro entorno, entendí cual era mi camino en la vida. Traer Ike Pono a Hawaii.