Quijotee

CAPÍTULO III

Don Quijote había quedado enterado por boca de Sancho que sus aventuras habían sido versionadas e impresas en forma de novela. Así que, hallándose en su casa, don Quijote aguardaba lallegada Sancho y el bachiller Sansón Carrasco, quien les daría testimonio de ello. Una vez llegan, don Quijote les recibe cordialmente y junto a su escudero, empieza a realizar cuestiones de todo tipoa Sansón, quien ha leído la obra completa. Les cuenta que Cide Hamete Belengeli, autor moro, ha narrado cada uno de los episodios vividos por don Quijote y Sancho, y que su historia es ahoracélebremente conocida, leída y traducida alrededor del mundo. Comentan cómo ha sido la novela escrita, y el bachiller diluye las sospechas del hidalgo, que temía que al ser moro quien lo había retratado sobreel papel, hubiese sido deshonrada su figura por mentiras e historias falsas. Por otro lado, Sancho se centra en averiguar si en efecto sus contribuciones y sufrimientos como segundo personaje de lahistoria, quedaron inmortalizados también. Tras comentar diferentes sucesos ocurridos en el libro, Sancho se marcha a por un par de tragos, quedándose Sansón en casa de don Quijote a fin de continuarcon su charla más tarde.
En principio, don Quijote, algo inquieto ante la idea de que el autor de la novela sea de llamado Cide, nombre propio de una raza que él considera farsante e inverosímil, temeque sea poca la veracidad con la que se cuentan los hechos, privándolo así del honor que él mismo cree tener, lo que le supondría a su juicio, un castigo peor que la muerte. Enterándose de que al igualque las que considera hazañas, sus castigos y malos momentos quedaron impresos de igual manera, don Quijote se molesta, puesto que considera que son factores prescindibles, cuya no mención noalteraría el hilo del argumento, y que bien podría haber hecho Belengeli en ahorrárselos. Motivado por su inexplicable orgullo, don Quijote se atreve a compararse con los grandes personajes de la...