Realidad de lo real-ficcionario

Realidad de lo real-ficcionario
Andrea Ferrari, en el articulo “Sherlock vive”, plantea en primera instancia los resultados de una encuesta dirigida hacia un grupo de jóvenes británicos. Estapropone la interrogante sobre la existencia del personaje creado por Arthur Conan Doyle: Sherlock Holmes - reafirmada por un 58 por ciento de los encuestados- y la del ministro, historiador y escritorcontemporáneo Winston Churchill - ignorada por el 23 por ciento, bajo el criterio que lo considera “un personaje de ficción”-. Mas allá de los resultados, Ferrari no se interesa por el desconocimientode los propios ingleses encuestados frente a una figura histórica como Churchill - para nada exento de méritos pues, por el año 1945 ya era admirado por su protagonismo durante la intervención deGran Bretaña en la Segunda Guerra Mundial y también obtuvo el Premio Nobel de Literatura en 1953-. Por otro lado, la autora del artículo se admira frente a las respuestas y se cuestiona el por qué eldetective ficcionario es confundido como real y el actor político real considerado mera ficción.
Antes de ingresar al campo de conclusiones generales, voy a recapitular un poco más el artículoleído.
La cuestión de la “personificación” del detective Holmes, dentro del mundo en el que vivimos, puede justificarse por varias razones. Una de ellas es la similitud que presenta en relación a unhombre real. Y ese hombre no fue producto del mero imaginario de Arthur Conan Doyle, ya que es sabido que creó al detective inspirado por las cualidades intelectuales del médico Joseph Bell (profesoruniversitario de Doyle). Asimismo, la estilística del creador de Holmes está dotada de descripciones que rozan lo real, como por ejemplo: la ubicación geográfica de la casa del detective - calle,número domiciliario e incluso detalles minuciosos de la ubicación de los muebles-, sus manías, contextura y rasgos físicos, desenvoltura en cierto círculo social - dentro del cual posee merecido...