Reseña de "dardos a la palabra"
Páginas: 2 (256 palabras)
Publicado: 10 de diciembre de 2010
Verdaderos dardos a la palabra.
Carreter Lázaro
El nuevo dardo a la palabra
Alianza Editorial, 10 de enero de 2003.
250 páginas, ISBN8403093403.
Lázaro Carreter nos abre paso a su libro con un prólogo que aclara cual es su objetivo, reunir su trabajo de esos últimos cuatro años en elperiódico El País. Así pues este libro es una recopilación de sus artículos publicados con el fin de hacernos ver cómo destrozamos nuestro idioma. El título de este librosuena leve en comparación con las duras críticas que se ven reflejadas en él, con un estilo formal e irónico y bastante ameno, dirigido a cualquiera que quiera darsecuenta de los garrafales errores que se comenten y de los que, en muchas ocasiones, no somos conscientes.
Nos muestras como nuestros profesionales abusan de lasmetáforas absurdas y sacan del baúl palabras empolvadas para convertirlas en palabras vulgares sin saber usarlas por completo sin diferenciar los significados ni los maticesy en ocasiones muy frecuentes, estos son inventados por ellos mismos. Al perder significados, igualamos palabras, perdemos matices y empobrecemos el idioma al mismotiempo que achicamos las mentes hispanohablantes, no enriquecemos en nada nuestro idioma, lo vulgarizamos y solo demostramos falta de respeto y educación.
Endefinitiva este libro deja claro que tanto políticos como periodistas, publicistas locutores, etc. en principio personas “cultas”, en su afán por “modernizar” el idioma,cometen errores tremendos por mera ignorancia. Arrastrando así a oyentes habituales al mismo camino y estos errores terminan convirtiéndose en la norma. (229 palabras)
Carreter Lázaro
El nuevo dardo a la palabra
Alianza Editorial, 10 de enero de 2003.
250 páginas, ISBN8403093403.
Lázaro Carreter nos abre paso a su libro con un prólogo que aclara cual es su objetivo, reunir su trabajo de esos últimos cuatro años en elperiódico El País. Así pues este libro es una recopilación de sus artículos publicados con el fin de hacernos ver cómo destrozamos nuestro idioma. El título de este librosuena leve en comparación con las duras críticas que se ven reflejadas en él, con un estilo formal e irónico y bastante ameno, dirigido a cualquiera que quiera darsecuenta de los garrafales errores que se comenten y de los que, en muchas ocasiones, no somos conscientes.
Nos muestras como nuestros profesionales abusan de lasmetáforas absurdas y sacan del baúl palabras empolvadas para convertirlas en palabras vulgares sin saber usarlas por completo sin diferenciar los significados ni los maticesy en ocasiones muy frecuentes, estos son inventados por ellos mismos. Al perder significados, igualamos palabras, perdemos matices y empobrecemos el idioma al mismotiempo que achicamos las mentes hispanohablantes, no enriquecemos en nada nuestro idioma, lo vulgarizamos y solo demostramos falta de respeto y educación.
Endefinitiva este libro deja claro que tanto políticos como periodistas, publicistas locutores, etc. en principio personas “cultas”, en su afán por “modernizar” el idioma,cometen errores tremendos por mera ignorancia. Arrastrando así a oyentes habituales al mismo camino y estos errores terminan convirtiéndose en la norma. (229 palabras)
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