Situación de Brasil

Situación de Brasil
El crecimiento mundial será de 3,5% en 2015 y 3,9% en 2016.
La economía brasileña se contraerá 0,7% en 2015, tras mantenerse estancada en 2014.
En el primer trimestre el PIB se redujo 0,2% t/t y las señales recientes apuntan a un deterioro más fuerte en el segundo trimestre. A pesar de los riesgos bajistas, una ligera recuperación debe materializarse en el segundo semestre.En todo caso, el entorno para la actividad económica será muy desfavorable debido al impacto negativo tanto de factores externos como internos. Entre los primeros, destaca la nueva caída de los términos de intercambio como consecuencia de los menores precios de las materias primas. Con respecto a los factores internos, los más relevantes son: i) el tono restrictivo de las políticas fiscal ymonetaria; ii) el aumento de los costes afrontado por las empresas y familias debido al realineamiento de los precios de los productos regulados por el gobierno y a la depreciación del tipo de cambio; iii) la crisis de Petrobras, por sus efectos sobre la economía y sobre el ya turbulento entorno político; iv) el riesgo de racionamiento de energía. Asimismo, el impacto negativo de estos factores seconcentrará en este año. Prevemos que el PIB crezca de forma moderada en 2016 (1,8%), en línea con la esperada recuperación de la confianza tras los ajustes –monetario, fiscal y cambiario- que se materializarán a lo largo de 2015.
La inflación permanecerá alrededor de 8,0% en lo que queda de 2015 y se moderará hasta 5,5% en 2016 después que el impacto del realineamiento de los precios administrados sedesvanezca. La falta de margen de maniobra en el ámbito fiscal ha obligado al gobierno a ajustar al alza el precio de los bienes y servicios regulados. Así, la inflación en este segmento alcanzó recientemente más de 13,0%, ocasionando un repunte del IPC hasta más 8,0%. Hacia adelante, prevemos que la inflación se mantendrá alrededor de este nivel en lo que queda de año: el final del proceso decorrección de precios regulados debe evitar un repunte aún mayor de la inflación, mientras que el impacto de la depreciación cambiaria y los factores inerciales impedirán una moderación significativa de las presiones sobre los precios internos. En 2016, cuando el efecto de la corrección de los precios administrados registrado en los primeros meses de 2015 desaparezca, la inflación deberá moderarse,aunque permanecerá por encima del objetivo de 4,5%.
El ajuste restrictivo de la política económica ha continuado en los últimos meses, con nuevas acciones monetarias y fiscales. A pesar del inestable entorno político, este proceso debería continuar en los próximos meses. Más medidas fiscales deberían permitir que el sector público genere un superávit primario de 0,9% del PIB este año, por debajodel objetivo de 1,1%, pero significativamente mayor que el de 2014. Por otro lado, el BCB debe seguir ajustando al alza los tipos Selic hasta al menos 13,75%.
Esperamos que este proceso de ajuste permita una recuperación gradual de la confianza y de la actividad económica a partir de la segunda mitad del año. Asimismo, hay un riesgo no despreciable de que las turbulencias políticas limiten elproceso de ajuste y que en consecuencia los agentes lo perciban como insuficiente. En este caso el repunte previsto de la actividad económica estaría amenazado. Los mercados financieros domésticos se calman, pero siguen pendientes del ajuste económico y de la Fed. Los activos financieros domésticos repuntaron recientemente, debido a la percepción de que la normalización monetaria en EE.UU. será mássuave que lo esperado, por la mayor confianza en el ajuste de la política económica y los menores riesgos relacionados a la crisis de Petrobras. En todo caso la evolución de estos factores debe seguir generando turbulencias en los próximos meses. Con respecto al real brasileño, consideramos inevitable que se siga depreciando a lo largo de 2015 y 2016.

Brasil: el ajuste de la política económica...