SOBRE LA MALA EDUCACIÓN

SOBRE LA MALA EDUCACIÓN
Por JOSÉ GUILLERMO ÁNGEL | Publicado el 5 de abril de 2014

Estación Tinieblas, en la que se reúnen los que no leen ni saben escribir, los que carecen de formacióngeográfica y de historia, los que no saben si cuando suman restan o si una multiplicación es una división. Y donde se habla con las peores palabras, haciendo gala de la ignorancia y la matonería. Gente sincreencias claras son la realidad, gozosas en el ejercicio del estorbo, cantadores inmarcesibles de goles y obsesivos en llenar formatos que nadie se cuida de revisar para ver qué certidumbre hay ahí. Y,a todo esto, un analfabetismo funcional galopante (se lee sin entender el sentido de las palabras y las frases, se cree que las estadísticas son la realidad, se lucen equipos electrónicos poderosospara posar de inteligentes, etc.). Y como en El gran Burundún Burundá, la clientela de la estación Tinieblas crece (Zalamea Borda diría, la Audiencia) y reinan las mentiras, el medio ambiente quedesaparece y la adhesión a pecados más tenebrosos.
América Latina (y especial Colombia) se ha vuelto especialista en ocupar los últimos lugares en educación. Pruebas tan simples como escoger la mejoropción, desenvolverse delante de un aparato que expide tiquetes, buscar la ruta más corta, darle valor real a las cosas, etc., no han podido ser superadas. Y esto sin hablar de comprensión de lectura,formulación de proyectos, usos de las matemáticas en la vida cotidiana y la expresión oral de ideas, espacios estos que más nos parecen formulaciones de física cuántica. Y un afán increíble de administrarla ignorancia en todo tipo de formatos y planes de marketing para que la educación sea un negocio: entradas en dinero y salida de personas que no saben quiénes son, dónde están ni qué saben hacer.Pero eso sí, ríen felices.
Un hombre hace lo que hicieron con él. Sus límites de acción dependen de la educación que le dieron. Y si se quiere hacer país (como tanto se propone), la base es la...